Leonardo Gutiérrez Correa dijo: “el personal médico como enfermeras, administrativos y entre otros, son verdaderos héroes”. Personas que pudo constatar trabajan hasta extenuarse, muchas veces, sin el equipo necesario para su protección.
Gutiérrez iba a perder ayer el vuelo 1101 de Viva Aerobús a la Ciudad de México que salió después de las 9:30 horas, debido a que el automóvil en el que se dirigía al Aeropuerto Internacional de Mérida tuvo un contratiempo y llegó a minutos de la hora de salida.
Cuando intentó cruzar el filtro para ingresar a la sala de última espera y abordar el avión, lo detuvieron, porque los documentos que tenía para trasladar las cenizas de su madre María Candelaria Correa Rodríguez, le faltaba el sello de la Secretaría de Salud que se tramita ante el departamento de Sanidad Internacional, en su desesperación, bajó rápidamente, pero olvidó el acta de defunción en el bolso de su esposa que logró pasar, con la que se comunicó por teléfono, para que saliera, pero el personal del filtro le indicó que no era posible.
Nuevamente la suerte le sonrió, porque uno de ellos (vigilante) fue por el bulto y se lo entregó. Antes de cruzar el filtro, volvió a pedir que se haga un reconocimiento a los doctores y personal del IMSS quienes dedicaron tiempo y esfuerzo por atender a su madre contagiada de COVID-19, que lamentablemente falleció hace unos días y antes de morir pidió que sus cenizas fueran depositadas en el nicho, en la Ciudad de México, donde nació.
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SY