Después de la manifestación pacíficaque realizaron mujeres tianguistas a las puertas del Palacio Municipal el pasado miércoles 24 de marzo, sobre la que autoridades hicieron caso omiso, éstas decidieron interponer un amparo comunal con ayuda de Víctor López, secretario federal de la Confederación General de Trabajadores, a quien designaron como representante legal para poder reabrir de nueva cuenta los tianguis de Kanasín.
Tras el intento fallido por parte de las comerciantes de llegar a un acuerdo con las autoridades para poder vender sus productos en los tianguis de Francisco Villa y Villas de Oriente, ayer más de 50 mujeres se presentaron de nueva cuenta, ahora con apoyo de representantes de los tianguis de los fraccionamientos San Camilo y Flor de Mayo, quienes aseguraron que ellas no se dejaron intimidar por los agentes municipales que quisieron hacerles lo mismo que a los de la Francisco Villa.
María de la Cruz Euán, representante de las tianguistas de San Camilo y Flor de Mayo, afirmó que ellas también habían sufrido los mismos abusos por parte de los oficiales, pero siguieron firmes en sus puestos, por lo que trataron de intimidarlas sin resultado.
“Así como a las de la Pancho Villa, los policías llegaron a querer sacarnos, pero les dijimos que necesitábamos trabajar y que no nos íbamos a quitar, por lo que nos empezaron a hablar de mala manera e incluso uno de ellos pateó la ropa de una de las venteras, preguntando de quién era y le contesté que era de todas, por lo que se retiraron entre amenazas de volver, y estuvieron dando vueltas por el lugar intimidándonos, ahora vinimos en representación de todo ese sector para que vean que somos muchas y que podemos contra ellos”, expresó.
Algunas de estas mujeres comentaron que tienen miedo a que vuelva a suceder lo que pasó hace unos años, cuando personas del tianguis fueron golpeadas y sacadas a la fuerza de un campo en Kanasín.
Deisy Liberada Solís dijo tener miedo a las represalias, pero que eso no le impide levantar la voz. “Yo estuve cuando a unos compañeros tianguistas los golpearon hace unos años y los sacaron del lugar donde se ponían a vender; me da miedo que pase eso, a mi edad no puedo estarme peleando, pero vengo a dar a apoyo a las compañeras”, recalcó la octogenaria, y agregó que seguirá “al pie del cañón ante lo que pueda pasar”.
“Me quedé sin trabajo y mi hijo está en el último año de su carrera y hay que apoyarlo; vendo comida, hago tianguis en mi casa y toda la semana vemos qué hacer para comer, pero sí necesitamos el tianguis, es nuestro medio de vida”, afirmó.
El secretario sindical comentó que aún no han tenido respuesta por parte del Ayuntamiento del municipio con respecto al documento que presentaron para poder tener una plática conciliatoria por ambas partes, por lo que aseveró que, si siguen sin respuesta, en el transcurso de la tarde se verán obligados a meter una queja directamente con el Gobernador del estado.
“Aún siguen sin darnos respuesta de la solicitud para poder dialogar con el presidente municipal o algún representante del Ayuntamiento, por lo que iremos a ver qué pasó. Si siguen con la misma postura, nos presentaremos ante el Gobernador para levantar una queja formal de las autoridades de Kanasín; sin embargo, introduciré un amparo comunal para que estas mujeres puedan vender sin temor a represalias por parte de la Policía Municipal”.
Víctor López, en conjunto con su equipo de trabajo, y Andrea Escamilla y María Euán, representantes de las tianguistas, recolectaron credenciales de elector para anexar al documento que se envió para realizar el amparo.
Seguidamente le tomaron fotos a cada una de las mujeres para afiliarse a la Confederación General de Trabajadores y así darles sus credenciales para que las autoridades sepan que están bajo su protección.
Escamilla aseguró que seguirá el proceso conforme se le indique, pero que gracias al amparo interpuesto ellas laborarán normalmente en los tianguis, pues con ese documento se sienten más seguras y podrán trabajar sin miedo.
“En lo que nos atienden por parte del Presidente Municipal y nos dan una respuesta definitiva, nosotras seguiremos laborando sin miedo, ya que este documento, como su nombre lo dice, nos ampara para que los agentes municipales no puedan tocarnos ni sacarnos de nuestros puestos de trabajo”, finalizó.
Las tianguistas recibieron 15 despensas de forma anónima, que fueron repartidas por las representantes de las mujeres de la tercera edad pertenecientes al grupo. La persona que hizo el donativo lo realizó al ver la lucha por la que están pasando las mujeres para poder laborar, por lo que no dudó en poner su granito de arena.