Melissa Amairani Herrera Escamilla, se encuentra delicada de salud debido a al deterioro de su riñón, por lo que solicita ayuda de las autoridades y de la comunidad para poder salvar su vida, pues asegura que su tratamiento, además de ser muy costoso ya no le está funcionando.
Melissa, de 26 años de edad, sufre de insuficiencia renal, padecimiento que se ha ido empeorando debido a la falta de tratamiento, el cual no ha podido continuar, ya que por la pandemia su esposo se quedó sin empleo y ya no cuenta con Seguro Social, la joven comentó que los análisis médicos que requiere son muy costosos, al igual que los medicamentos y bolsas de diálisis.
“Antes de que comenzara la pandemia, un nefrólogo del Seguro Social ya me había dicho que necesitaba un trasplante de riñón, pues el tratamiento ya no estaba haciendo mucho efecto, se empezó el trámite para la intervención, pero por lo del virus se frenó todo, después mi esposo se quedó sin empleo y ya no tengo seguro médico, por lo que se me hace muy difícil costear todo con respecto a mi enfermedad, hay que hacer análisis, comprar medicamento y demás”.
Herrera Escamilla comentó que su situación se ha ido agravando al grado de tener sangrado por la nariz, en consulta con un cardiólogo le indicaron que el trasplante se tiene que hacer lo antes posible, debido a que su corazón aún se encuentra óptimo para la cirugía.
“Acudí con un cardiólogo por un malestar, el doctor me dijo que mi riñón estaba afectando otros órganos, por lo que debería operarme lo más pronto posible, ya que ahora mi corazón soportaría el trasplante, pero que más adelante si las cosas continúan así ya no lo resistiría, por lo que me siento muy preocupada por eso”.
Félix Domínguez, enfermero y familiar de Melissa, indico que las consultas rondan entre los cinco mil y los siete mil pesos, sin contar los medicamentos, análisis y bolsas de diálisis que la paciente necesita, por lo que familiares y amigos, realizan rifas, ventas, entre otras cosas para apoyarla.
“Cada caja de bolsas para que se dialice cuesta 700 pesos, ella utiliza cuatro diarias, es decir una caja cada dos días, las consultas con el especialista varían entre cinco mil y siete mil pesos, dependiendo si necesita algún análisis urgente o cualquier otra cosa en el momento, y como por el momento no tienen un ingreso dijo, familia, amigos, vecinos y otros que se han sumado a la causa, han donado objetos, ropa y todo tipo de cosas para hacer rifas o venderlas y así costear las necesidades básicas de Melissa, incluso hay gente que nos apoya con dinero y eso se les agradece infinitamente”.
Herrera Escamilla indicó que la diálisis ya no le está haciendo efecto debido a lo avanzado de la enfermedad, por lo que espera con ansias un milagro para recibir un donador de riñón y así poder operarse y tener una esperanza de vida.
“Espero tener un donador, ya que necesito un riñón con urgencia, soy madre y no quisiera dejar mis hijos desamparados, no importa si la ayuda llega del gobierno, de un particular, de donaciones de donde sea, lo único que quiero es recuperarme y estar bien para mi familia”, finalizó.