Valladolid, Yucatán.- Las calles del Centro Histórico, la Calzada de los Frailes y la majestuosidad del Cenote Zací se observan cada día con mayor número de turistas recreándose con esas bellezas; algunos tomándose fotos, otros disfrutando del fresco de la lluvia que se había dejado caer durante la mañana y saboreando un helado, un raspado o uno de los platillos que integran la rica gastronomía, en un muestrario en el Bazar Municipal de esta ciudad.
Conversando con algunos de los visitantes en el municipio, coincidieron en la belleza arquitectónica, la tranquilidad, la seguridad y sobre todo la exquisita gastronomía de sus comidas.
“Juan Carlos Montoya, quien venía desde Colombia junto con su esposa, expresó que llevaban ya cinco días en la ciudad y que todo era muy bonito; agradeció la amabilidad de la gente, y compartió que estaban dirigiéndose hacia el Cenote Zací y que por supuesto regresaría nuevamente, ahora con sus hijos”.
Así mismo, dijo que es excelente que se esté mejorando toda esta belleza y espera poder regresar para disfrutarlo mucho más.
En otro grupo de turistas, Lila Johana Mosqueda comentó que procedían también de Bogotá, Colombia, que eran ocho amigos y que estaban apenas llegando, pero andaban encantados con todo lo que se encontraban a su paso.
Se encaminaban a Chichén Itzá, pero ya pensaban regresar y sobre todo al enterarse de que se realizarían mejoras que darían más hermosura a todo este entorno. Además, afirmaron que está entre sus planes volver muy pronto a la Sultana de Oriente si la vida se los permite.
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Daniel Álvarez Morales, quien se encontraba con su esposa Mayra y sus hijos saboreando los platillos que se preparan en el Bazar Municipal, platicó que provenían de Toluca, Estado de México, y que “por ser la primera vez que visitamos Valladolid, nos enamoramos de ella y esperamos que no sea la última vez que venimos, la recomendaremos a nuestros amigos y familiares”.
Dijo que también visitarían Chichén Itzá y que al saber que existen muchos lugares dentro y fuera de la ciudad, como enormes atractivos naturales y arquitectónicos, no dudarán en regresar cuando las circunstancias se los permitan.
aarl