La mayoría de los pescadores que habitan en Hunucmá, un número mayor a los 900, en este mes de mayo han dejado de viajar al puerto de Sisal, donde se dedican a la actividad pesquera y según comentan esta difícil decisión se debe a que en este mes la pesca no es redituable y en lugar de ganar, salen adeudados con los patrones comerciantes.
Pascual Koyoc comentó “este mes ha sido verdaderamente difícil para todos los pescadores, a razón de que la captura del pez de escama es muy baja y muchas veces los peces no alcanzan la talla que permite comercializarla, y, en lugar de ganar salimos perdiendo y endeudados con los patrones”.
“Ser pescador no es fácil y requiere de gastos para los que vivimos en Hunucmá, desde que salimos de casa ya estamos gastando, el pasaje, el desayuno, la carnada y la gasolina, la renta de la embarcación. Todo hay que pagar y si no tenemos hay que prestar, así que ya estamos con deudas desde antes de salir al mar”, agregó.
“Por ahora muchos estamos buscando otras alternativas, por ejemplo, somos carpinteros, albañiles o mototaxistas. El caso es que tenemos que trabajar para el sostenimiento de la familia”, señaló.
José Dolores Gil, oriundo del puerto de Sisal, comentó “la verdad los pescadores la están pasando mal junto con sus familias, y prueba de ello es que muchos están prefiriendo no salir de pesca, ya que por experiencia saben que esta actividad, en estos días, no es redituable, y sí muy peligrosa por las turbonadas que azotan por las tardes”, añadió.
“Los pescadores que salen, lo hacen por necesidad, no se alejan de la orilla y retornan al medio día antes que entre el mal tiempo por las tardes, pues en estos días ha estado lloviendo diario, y tenemos que ser precavidos, porque el mar es fuente de trabajo pero también es peligroso y debemos respetarlo”, finalizó.