A pesar de que los casos de COVID-19 han ido en aumento en la entidad y sobre todo en Mérida, los módulos y túneles sanitizantes instalados en el Centro de la Ciudad han sido parcialmente desinstalados durante las últimas semanas.
Con el objetivo de intensificar las medidas sanitarias para prevenir la propagación del SARS-CoV-2, desde el mes de abril de 2020 la administración municipal comenzó a instalar dichos módulos en “puntos estratégicos” del primer cuadro del Centro Histórico, a la par de algunos lavamanos para el uso de los transeúntes.
Estos fueron colocados en lugares como el Parque Eulogio Rosado, en la entrada de los mercados Lucas de Gálvez y San Benito, en los alrededores de la Plaza Grande, así como en esquinas cercanas a los sitios de ascenso y descenso del transporte público urbano.
Sin embargo, al día de hoy algunos módulos no cuentan con los motores para dispersar el agente sanitizante y otros fueron retirados por completo, como el que se encontraba frente a la Catedral de San Ildefonso y en las afueras de los mercados.
Transeúntes comentaron a POR ESTO!, que la decisión del Ayuntamiento de Mérida, de removerlos de las calles, se debe a que los mismos peatones maltrataban la instalación o se robaban las piezas.
“El de acá, dos veces se robaron la bomba, también de repente amanecía y el tinaco no tenía tapa, entonces yo creo que se cansaron y por eso lo dejaron de colocar”, comentó un ciudadano, refiriéndose al arco inflable que se encontraba frente a la Catedral.
En ese mismo sentido, una comerciante del mercado Lucas de Gálvez indicó que muchos peatones evitaban pasar debajo del arco sanitizante, argumentando que les arrojaba agua con cloro y eso podría dañar sus prendas de vestir.
“Se peleaban con los inspectores porque les decían que era obligatorio, pero muchos preferían darse la vuelta para ir a comprar en otro lado, que pasar debajo del chorrito”, agregó la mujer.
En su momento, este rumor fue desmentido por la administración municipal, quien especificó que el líquido se trata de una fórmula compuesta por germicida de amonio, con poder bactericida, fungicida, virucida y algicida, capaz de eliminar bacterias y hongos como el SARS-CoV-2, Influenza, Escherina colli, Bacilus subtilis, Staphylococcus, Pseudomona euriginosa, Salmonela typhi, entre otros.
En el caso de los lavamanos instalados en el parque Eulogio Rosado y en la explanada trasera del mercado San Benito, éstos siguen funcionando con normalidad, aunque con frecuencia los dispensadores se quedan sin abasto de jabón líquido.
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JG