Yucatán

Exestación de trenes en Kanasín: Así lo recuerdan los habitantes

Una exestación de trenes marco la vida de mucho de los habitantes de Kanasín, que ahora la recuerdan con añoranza tras su destrucción en 2002 por el paso del huracán Isidoro
Los vecinos de Kanasín llegaba a vender frutas de la época a los pasajeros del tren / Martín González

En el sitio que durante años albergó la estación de trenes de Kanasín, hoy en día funciona el Gimnasio Polifuncional en el que se realizan contiendas de boxeo en la actualidad.

En entrevista con POR ESTO! familias de Kanasín hablaron y recordaron la exestación que desapareció definitivamente con el paso del huracán Isidoro en 2002.

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Graciela Solís Herrera, quien vive frente al Polifuncional, habló con añoranza de la exestación de trenes. “Recuerdo que la gente llegaba a vender frutas de la época a los pasajeros del tren. Fueron épocas muy bonitas que todavía recuerdo, la estación estuvo abandonada muchos años y sirvió de refugio de borrachitos hasta que el ciclón Isidoro terminó por derrumbar el inmueble que poco a poco se fue destruyendo”, aseguró.

De acuerdo con la entrevistada la línea del tren era de ida y vuelta en diferentes horarios.

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Por su parte, Concepción Andrade, habitante de la población, señaló que ella no alcanzó a ver en funcionamiento la estación de trenes, sin embargo, su padre Fernando Andrade Rodríguez (+) le platicó de ésta y dijo que el tren que venía de Peto pasaba a las 8:30 horas y posteriormente pasaba otro más a las 9:30 y por la tarde a las 15:30 horas que era el último del día.

“Con la llegada del huracán Isidoro se derrumbó la mitad de la estación, ya en desuso, y quedó en el olvido, hasta que años después la derrumbaron por completo y se comenzó a construir el Polifuncional”, recordó.

Adriana Briceño Sánchez, de 85 años, mencionó que “cuando llegaba el tren uno de los pasajeros, amigo nuestro, tiraba su ‘fayuca’ en el terreno de su suegra para evitar que le fuera decomisada por los aduaneros que esperaban en la estación a los vendedores de ‘fayuca’ que venían de Chetumal y tomaban el tren en Peto que pasaba a Kanasín con dirección a Mérida”, dijo.

La entrevistada recordó que, en 1951, la calle 20 entre 25 y 23 de Kanasín, donde vive actualmente, era pedregosa, además, no había mercado y la gente venía a la estación a ofrecer sus productos. “En ese entonces la gente ofrecía su venta en la estación, ya que no existía el centro de abasto”, acotó.

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Adriana nació en el municipio de Peto en 1935 y se casó en 1951 en Kanasín, durante los festejos realizados en honor a la Virgen de la Asunción.

GH