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Esta semana se embarcó una expedición con un grupo de científicos que buscan examinar los arrecifes yucatecos del Parque Nacional Alacranes, el cual es una zona poco explorada hasta ahora debido a su lejanía. El objetivo de la investigación es recabar datos concretos del daño humano a estos organismos marinos.
Durante 14 días que se planea dure la expedición, el grupo de científicos documentará el daño resultante de la pesca ilegal y el turismo en los arrecifes de Alacranes y Bajos del Norte en la Península de Yucatán, además, se espera determinar el estado de salud de la biodiversidad de la zona y, con información actualizada, exigir a las autoridades ambientales fortalecer su conservación.
La importancia de estos organismos vivientes radica en que los arrecifes conforman la barrera natural clave contra los huracanes cada vez más intensos por el cambio climático. Además, protegen a las comunidades costeras contra las olas e inundaciones. Asimismo, ofrecen refugio, alimento y de una zona para desovar a la fauna marina.
De acuerdo con la Organización Oceana México, el Parque Nacional Arrecife Alacranes cuenta con la estructura de corales más grande del sur del Golfo de México, además, es de las más diversas a nivel internacional, por lo que tiene una mejor oportunidad de sobrevivir a los efectos del cambio climático.
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A pesar de ser un área natural protegida, esta reserva registra pesca ilegal, contaminación, sobrepesca e impactos turísticos, por lo que este viaje busca contribuir a recuperar un arrecife más sano y equilibrado, donde las especies en algún grado de peligro. Por ello, la vicepresidenta de la Conanp declaró:
“La Comisión Nacional de Áreas Naturales Protegidas (Conanp) hace maravillas con el presupuesto que tiene para cuidar los arrecifes, pero Alacranes está a 10 horas en barco de la costa, por lo que es caro. Se debe recurrir a mayor monitoreo satelital de embarcaciones pesqueras”.
“La otra zona arrecifal que documentarán los científicos, Bajos del Norte, es un lugar poco explorado hasta ahora y carece de cualquier tipo de protección. “Queremos ver si eso ha influido en la salud de los arrecifes y a partir de ahí determinaremos las políticas públicas”, agregó Terrazas.
Del Arrecife Alacranes dependen más de 4 mil 300 familias de pescadores de Yucatán, pero hay especies en riesgo. “De la pesca ilegal detectada por Oceana en Áreas Marinas Protegidas, donde más encontramos embarcaciones potencialmente de esta práctica ilegal fue ahí, por lo que es un gran reto”; finalizó.
RC