Yucatán

Avistamiento de mapaches se vuelve el nuevo atractivo turístico de Celestún

Debido al aislamiento por la pandemia de COVID-19, la fauna local ha aumentado, la cual, poco a poco se acerca a las zonas pobladas de Celestún en busca de comida y conviviendo con los turistas
Alimentar mapaches se ha vuelto una de las principales atracciones para los visitantes / José Luis López Quintal

El puerto de Celestún es una de las comunidades de la Entidad que de manera voluntaria en el año 2020, al inicio de la pandemia por el COVID-19, decidieron cerrar sus puertas de entrada y salida a la población, este aislamiento, según algunos habitantes, produjeron cambios en la naturaleza, en especial con la fauna. Los pobladores creen que estas modificaciones se generaron principalmente por el silencio que permaneció por más de un año.

El cierre de la localidad también produjo que cesara la música en los bares, el sonido de los motores de mototaxis, vehículos terrestres y embarcaciones, lo que generó un silencio sepulcral, dicen los habitantes del puerto.

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Algunos pobladores de Celestún comentaron que en los días del aislamiento numerosas aves y animalitos del monte se acercaron a la población, tal vez en busca de alimento, y también hay indicios de que estos también se reprodujeron en grandes cantidades.

En estos días de la recuperación económica con la reapertura de las actividades comerciales y turísticas en el puerto, el avistamiento de aves y otras especies de la fauna costera, son el tractivo de los turista que visitan esta comunidad, en especial quienes desean interactuar con animalitos como el mapache, que es considerado silvestre y que ahora convive con el ser humano.

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En el parador turístico, que se encuentra al Poniente de la población a la entrada al puerto, atracan las naves que se utilizan para los viajes a la ciénega y manglares, donde, desde jóvenes hasta adultos, aprovechan para vivir la experiencia de alimentar a los mapaches.

Juanita Hernández, una visitante, comentó que este fin de semana sus nietos visitaron el puerto de Celestún y que se divirtieron mucho, pero aclararon que lo que más les divierte es el tener la oportunidad de acercarse a los mapaches y alimentarlos, de hecho uno de los niños le preguntó a la abuela si podían llevar uno a casa.

Carlos Flores, vecino de la comunidad, dice que el parador turístico siempre ha sido uno de los atractivos más visitados en el puerto de Celestún, que en esta ocasión se puede tener la oportunidad del avistamiento de los animalitos de monte y mejor el poder interactuar con algunos de ellos, aclarando que no con todos, ya que en las carreteras cercanas al puerto se han visto leopardos que son peligrosos por naturaleza.

El entrevistado agregó que, hace unos días, una familia que viajaban en un vehículo particular se quedaron asombrados al encontrar a un costado de la carretera un felino, al que identificaron como un  leopardo, que evidentemente fue arrollado por algún vehículo de motor causándole la muerte.

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CC