Debido a la falta de continuidad sobre la denuncia interpuesta en la Fiscalía General del Estado (FGE) en contra del profesor Julián B., por golpear a una menor en la boca, el docente permanece en la primaria indígena “Lauro Aguirre” impartiendo clases.
En una reunión a puerta cerrada, padres de familia se opusieron al regreso del maestro a las instalaciones, luego de que este haya sido señalado maltratar a una pequeña. Tutores y supervisores del área educativa llegaron a un acuerdo en torno a las acciones a tomar para evitar que el docente señalado reincida en su conducta.
Le temen al maestro
El disgusto de los padres de familia consistió en que no querían que el maestro Julián B. sea reintegrado a esta primaria indígena. Los tutores, visiblemente alterados, señalaron que los menores a los que les ha dado clase les han mencionado que le temen al profesor.
Fue a las 7:30 horas cuando, en compañía de supervisores del área y a puerta cerrada, se llevó a cabo la determinación de la situación. Organizadores no permitieron a la prensa asistir a la reunión.
Los supervisores señalaron a los padres de familia que, debido a la falta de continuidad al caso por parte de la FGE, no existe un proceso vigente contra el docente.
Por su parte, padres y madres de familia exigían el despido definitivo del docente, debido a que éste ha sido señalado de causar daño a los menores a quienes ha dado clase. Entre los reclamos, los agraviados exigieron que el maestro de una disculpa pública a manera de remediar la situación.
Vigilarán al docente
Finalmente, los supervisores y los tutores llegaron al acuerdo de reincorporar al docente al primer grado de primaria, señalando que se encontraría fuertemente vigilado por parte del resto del plantel docente. A su vez, los padres de familia señalaron que, de reincidir en su conducta, no dudarán en tomar “medidas más fuertes” para evitar que esta situación continúe.
Al terminar la reunión, poco después 9:00 horas, supervisores de la zona se negaron a ser entrevistados por la prensa, argumentando que tenían “pendientes” que realizar en dicha institución.
Los padres de familia afirmaban que los menores de primer grado únicamente tomarán clases de forma híbrida para evitar el contacto con este docente.
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JG