M.C., de 28 años y oriunda de la comisaría de Timul, alega haber sufrido vejaciones por parte del conductor de la Unidad de Traslado Médico de Peto, esto después de que el mencionado no regresara por ella dejándola a su suerte, luego de que acudiera al hospital para visitar a su hija de dos meses de edad que se encuentra en terapia intensiva.
Asimismo, la mujer de escasos recursos indicó que acude tres veces al hospital a la semana para visitar a su hija, que, de acuerdo con estudios médicos, padece de problemas en los intestinos.
Ante lo mencionada situación, la mujer afirmó que el conductor del vehículo ha realizado señalamientos agresivos cuando tiene que utilizar este transporte, “ya veía que me iba a pasar algo así, y es que desde subir a la Unidad de Traslado Médico veía cómo el chófer siempre me decía ‘¿y tú qué vas a hacer a Mérida si no tienes nada?’, por respeto nunca le contesté una grosería, pero la razón por la que siempre viajo es por mi hija, que se encuentra delicada de salud y apenas tiene dos meses”.
En esta ocasión, cuando la madre había terminado su cita alrededor de las 12:30 horas, se percató que el vehículo de traslado aún no había llegado por ella, por lo que pensó que habría ocurrido un retraso, pero luego de varias horas de espera, la mujer decidió encontrar una manera de regresar a su comisaría por sus propios medios.
Al no conocer la ciudad tuve que pedir prestado un teléfono para comunicarse a su madre y explicarle lo que había sucedido. La madre se dio a la tarea de pedir un taxi que cobró una tarifa de alrededor de 800 pesos para acudir por ella, llegando finalmente hasta 18:00 horas a su vivienda.
Por esta razón, la mujer no dudó en hacer un señalamiento con respecto a las malas prácticas de los encargados del vehículo de traslado para que no se repitan.
Síguenos en Google News y recibe la mejor información
JG