Las financieras siguen haciendo de las suyas y se aprovechan, en ocasiones, de la pobreza e ignorancia de la gente. Los amenazan con quitarles su vivienda.
Este es el caso de Luis Couoh González, de 44 años de edad y de oficio mototaxista en Kanasín, y quien por una enfermedad se vio en la necesidad de pedir prestados 9 mil pesos a la financiera Préstamos Yucatán. Ahora está cerca de perder su casa.
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Dijo que la empresa le cobró 3 mil 500 por el papeleo, su cuenta final quedó en 12 mil 500, que comenzó a devolver con 2 mil 100 mensuales, es decir 525 pesos semanales
“Los primeros seis meses abonas a intereses y posteriormente comienzas a pagar el capital”, dijo Couoh González.
Añadió que desafortunadamente esta financiera, como otras, se aprovecha de la pobreza y necesidad de la gente, pues nuevamente se presentó otro problema de salud en su casa, enfermó su esposa y se vio en la necesidad de suspender sus pagos.
Creo que ese fue el error, comentó a POR ESTO!, ya que los intereses comenzaron a subir de manera sorprendente, cada semana 100 pesos y si te atrasas otro mes sube la cuota a 200 semanales.
“Cuando me di cuenta ya debía 37 mil 500 gracias a los intereses, ahora ya no busco como salirme del problema. Me han estado amenazando con quitarme mi casa”, dijo.
Vecino del fraccionamiento Vistana ve difícil su situación, pues cuando acudió al Catastro por unos papeles se sorprendió cuando le informaron que su vivienda está en venta. “No lo creo porque la casa es todavía de Infonavit, a menos que haya sucedido algo raro, pero habrá que esperar”, dijo.
Dijo que turnó su caso a un licenciado que se “vendió” a la financiera, “pues en lugar de ayudarme, ahora me obliga a pagar a la empresa prestamista”.
Recordó que cuando recibió su préstamo leyó todo; sin embargo, tenía letras muy pequeñitas e ilegibles, “esas no las leí y menos les di importancia y creo que de ahí se están agarrando”.
Lo cierto, dijo el entrevistado, es que temo perder mi casa por 9 mil pesos que pedí prestados, puso su caso como ejemplo para evitar que otras familias pierdan su patrimonio.
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CC