Tarsilo Ventura, veterano apicultor de la población de Kinchil, comentó que son muchos los obstáculos que los apicultores de esta zona de Yucatán deben superar para continuar con esta legendaria actividad, fuente de trabajo y promotora de la salud.
Explicó que después de seis meses de trabajo y pagos a los ayudantes que cuidan y alimentan el apiario, el precio que pagan en los centros apícolas en la ciudad de Mérida son muy bajos, y va, de 32 a 34 pesos el litro, lo que trae como consecuencia que la apicultura ya no sea redituable y son muchos los apicultores que se ven en la necesidad de abandonar esta actividad.
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Pero también aclaró que: “Este asunto del precio de la miel es sólo uno de los problemas que enfrentamos en esta zona del Estado de Yucatán, ya que se instalaron grandes granjas de cerdos que están contaminando el agua, la flora y fauna. Se debe recordar que la apicultura depende de la flora y si esta se ve afectada, las abejas comienzan a debilitarse y a menudo abandonan el panal y por consiguiente la producción de miel es muy poca”.
En la población de Hunucmá, los apicultores participaron en un curso de capacitación denominado “El Manejo de la Colmena”, sin embargo, otros de los problemas que enfrentan son los que el apicultor Felipe Chan explicó: “Otro de los principales problemas definitivamente es la deforestación y la contaminación de las aguas; en la localidad hace unos años se instaló una fábrica de cerveza, la cual consume a la fecha grandes cantidades de agua y está afectando la floración; además que existen enfermedades ocasionadas por plagas de garrapa, la cual es muy difícil de combatir. No contamos con el apoyo de los gobiernos, prácticamente estamos solos, y muchos apicultores no pueden con los gastos y la inversión, por lo que optan por abandonar la actividad apícola”.
Antonio López Ceballos y Pedro Tzuc, al igual que otros apicultores situados en el tramo Hunucmá- Mérida, agregaron que en estos días en que se dedican a cosechar la miel, con tristeza han visto que la producción está muy baja y apenas alcanza para pagar a los trabajadores.
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CC