Aunque el Ayuntamiento de Mérida anunció con bombo y platillo la reapertura del Acuaparque, ubicado en las calles 6A y 27A de San Antonio Kaua II, con motivo de las vacaciones de Semana Santa, para algunas familias visitar estas piscinas públicas se ha vuelto una verdadera tragedia.
Son cientos de personas las que del 6 al 16 de abril han visitado este atractivo acuático en Vergel. Los que no pudieron ir a playa se quitan el calor en este balneario que en muchos dejará un buen recuerdo después de varios años que estuvo sin acceso al público.
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Pero no todas las historias en el Acuaparque son de felicidad, pues en redes sociales la usuaria Paty Goar denunció que uno de sus hijos regresó a casa, después de una visita con su familia al balneario, con una fuerte infección en los ojos y oídos luego de meterse a las piscinas.
"Mis hijos acudieron al Acuaparque porque reabrieron, se fue en familia y regreso con una infección en los ojos y oídos, si creen que estos lugares está muy padres, pues no, ya que ahí orinan, escupen, se echan gases y otras asquerosidades porque la gente es tan puerca que no tienen la educación es preferible ir otros sitios a jugar pasarla bien perooo por mi parte estos lugares jaaaaamas volverán a pisar mis hijos"(Sic).
En la denuncia que hace explica que debido a la conjuntivitis, el menor corre el riesgo de perder la vista. Además, por la gravedad de la infección esta ha abarcado a oídos y garganta. Esto debido a las condiciones insalubres, que la mujer señala, prevalecen en el Acuaparque.
"Se los dejo para que tomen conciencia que estos lugares no son saludables y por un día de diversión pones en riesgo la salud, publicaría sus ojos de mi hijo, pero como es menor de edad no puedo exponerlo", exhortó la madre de familia.
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AA