En sorpresivo operativo, inspectores de la Procuraduría Federal de Protección al Ambiente (Profepa) clausuraron tres predios en el Pueblo Mágico de Sisal, comisaría de Hunucmá, por violar artículos establecidos en la Ley General de Equilibrio Ecológico y la Protección al Ambiente.
Los inmuebles son propiedad de los supuestos ambientalistas e integrantes de las asociaciones Colonos de Sisal y Unidos por Sisal, específicamente de Guillermo Acosta Simón, Mike Kassouff y Víctor Paré.
Derivadas de las acciones en favor del medio ambiente encabezadas por la Profepa, personal adscrito a la delegación Yucatán procedió a la clausura.
Los tres inmuebles son complejos habitacionales que funcionan como hoteles y centros de hospedaje; se anuncian en redes sociales, plataformas digitales e Internet como Casa Sisal de Acosta Simón; Casa del Sol de M. Kassouff y el inmueble de Víctor Paré sin aparente razón social o denominación comercial.
La clausura de los centros de hospedaje, se realizó la víspera de esta semana tras detectarse diversas irregularidades
En el caso de Casa Sisal propiedad de Guillermo Acosta Simón que se anuncia en redes sociales e Internet se detectó que construyó una palapa en zona federal además de otras evidentes irregularidades en la construcción, pues puso césped que es una planta no nativa de la región y eso también está fuera de los lineamientos de la Semarnat.
Asimismo, construyó una palapa sobre zona federal y no respetó los 30 metros de duna costera hacia el interior de la propiedad, es decir, construyó en esa franja de arena.
Posteriormente, el personal de la Profepa colocó sello de clausura en las afueras del inmueble de Víctor Paré.
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Ambientalistas
Como se recordará en fechas pasadas los supuestos ambientalistas se rasgaron las vestiduras denunciando presuntas irregularidades en la construcción de inmuebles de terceras personas en vistas que a futuro les representarán competencia en el ramo turístico.
Recientemente, los supuestos ambientalistas, formularon denuncias contra de diversos proyectos inmobiliarios, buscando su clausura y con el objetivo de instaurar en Sisal un oligopolio en el creciente mercado de alojamientos y estancias turísticas en el ahora Pueblo Mágico.