Sentado al exterior de su domicilio, en franca calma, Don José Enrique Bocanegra disfrutaba de la tarde de este lunes, que llegó cargada de un ambiente fresco. El hombre de 88 años, originario de la Ciudad de México, aficionado a la pintura y quien dice ser pariente del escritor del Himno Nacional Mexicano, vivió un desafortunado incidente el pasado sábado, que bien, pudo terminar en tragedia.
El suceso que conmocionó a la ciudadanía, según cuenta José, fue provocado por un sujeto desconocido quien intentó robar una extensión, que fue adquirida por el adulto mayor, con el objetivo de realizar sus actividades cotidianos al exterior de su domicilio y así poder convivir con las personas, situación que aseguró, disfruta mucho.
"Para contactarme con la gente, procuro cocinar aquí afuera, tener mi televisión aquí afuera, entonces compré una línea para poder sacar la electricidad. Ese día se me olvidó meterla, desconectarla, entonces un avorazado vino a tratar de robársela, la estuvo jaloneando, hizo un corto circuito, hubo en explosión tremenda e inmediatamente se empezó a incendiar todo", describió el hombre.
Don José, aseguró que tiene la costumbre de levantarse a las 5:00 de la mañana, debido a que duerme temprano. Gracias a eso, comentó, logró percatarse de las llamas, que alcanzaron una altura considerable.
¿Desde hace cuánto tiempo habita el predio?
José, quien radica en la capital yucateca desde hace 38 años, contó que habita el predio desde hace dos décadas. Compartió que en el pasado se dedicaba a la venta de pinturas, y que al no tener un sitio en donde vivir, debía pernoctar en hoteles. Fue entonces cuando una pareja de españoles le ofreció el espacio en donde actualmente habita, para que no tuviera que cargar a diario con sus obras.
Al cuestionarle sobre el destino de los españoles, respondió que solo pudo verlos en el predio una ocasión, cuando acudieron para supervisar los trabajos de instalación de una toma de agua y un tinaco.
"Así me gusta estar, no me siento abandonado, ni triste", reveló el hombre, quien añadió que su hogar cuenta con todo lo necesario para poder vivir. Con una sonrisa pintada en su rostro, reveló que le gusta la poesía y que además es aficionado a la biblia.
Apoyo de la ciudadanía
El carismático personaje, compartió que las personas acuden a su domicilio para regalarle alimentos, ropa e incluso dinero. Comentó que la respuesta ha sido tal, que ya no cuenta con espacio en su refrigerador, por lo que no sabe que hacer con tanta comida.
De un momento a otro, un grupo de personas arribó al lugar, con herramientas y material de trabajo. Don José mencionó, que los envió una señora, con la intención de que realicen labores de mantenimiento.
Además, algunas personas acuden al predio para entregar alimento de mascotas, ya que algunos gatos han arribado al lugar, convirtiéndose en la compañía del amable señor, que hoy declaró, sentiste bien.