Un grupo minoritario de expulsados de la fraternidad tomó por asalto la sede histórica de la Gran Logia Unida “La Oriental Peninsular”, con lo que la masonería yucateca fue víctima del despojo del inmueble ubicado en la calle 63 con 72 del Centro Histórico de Mérida.
Cerca de las 15:00 horas del pasado domingo, unos 50 miembros de la conocida fraternidad acudieron a las puertas del recinto para solicitar a los invasores la desocupación pacífica.
Éstos, al percatarse de la presencia de un grupo numeroso de miembros, cerraron la reja con candado e impidieron el paso a los apoderados legales de la Gran Logia Unida “La Oriental Peninsular de Antiguos Libres y Aceptados Masones del Gran Oriente de Yucatán, A.C”, la cual fue legalmente constituida por la representación formal y reconocida de dicha potencia masónica.
Ante la negativa del grupo invasor y al subir de tono la discusión, los apoderados legales de la asociación civil solicitaron el apoyo de la Policía Municipal a través del número de emergencias 911.
Al acudir los elementos de la Policía Municipal, a los que se agregaron los de la Secretaría de Seguridad Pública del Estado, los apoderados legales y otros señalaron la flagrancia del delito de despojo de bien inmueble.
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Sin embargo, como suele ocurrir en estos casos, los elementos optaron por no intervenir porque era un conflicto entre particulares: se limitaron a la prevención del enfrentamiento entre bandos. Al lugar de los hechos arribó el comandante Miguel Ángel Suaste Huex, director del Sector Centro de la corporación de seguridad estatal, acompañado de varios elementos.
El grupo amotinado colocó una placa en la entrada con el nombre de La Peninsular Sociedad Civil Particular, al parecer, ese mismo día, horas antes de los sucesos. El grupo de invasores está encabezado por José Luis Bustillos González, propietario de Grupo Mercantil Artex SA de CV, integrante de la Delegación Yucatán de la Cámara Nacional de la Industria del Vestido (Canaive), fue expulsado de la masonería yucateca junto con un grupo reducido de miembros por faltas que son consideradas como delitos al interior de la agrupación.
En el lugar, se identificó como representante legal Roger Armando Pardío Villareal, quien fungió como integrante de la Coalición “Todos somos Yucatán”, conformada por los partidos Convergencia y del Trabajo, al igual que por ser el asesor jurídico de los ejidatarios de Pisté que se opusieron al proyecto del Tren Maya, mediante la solicitud de una indemnización superior a la que Fonatur les ofrecía.
Mediante videos del día del altercado, que causó la suspensión del tránsito por la calle 63, se ubicó al capitán en retiro del Ejército, Miguel Ángel Contreras García, amenazar al comandante Suaste Huex de denunciarlo por no favorecer a los invasores.
Los despojadores recurrieron a la contratación de los servicios de una compañía de seguridad privada, propiedad de la hermana de Carlos Antonio Hagar Pachón, quien está involucrado en conflictos jurídicos por deudas de carácter mercantil y con la Comisión Federal de Electricidad (CFE) por presunto robo de energía eléctrica.
También es señalado de haber sustraído recursos de la Tesorería de la Gran Logia. Según la historia publicada en su página web, desde su fundación, la Gran Logia Unida “La Oriental Peninsular” ha pasado por diversas etapas y se ha mantenido como un referente importante de la Masonería mexicana y también de otras latitudes.
El 15 de agosto de 1882, el organismo llamado Supremo Consejo de México dio carta patente para constituir en la ciudad de Mérida, la Gran Logia Simbólica del estado de Yucatán del Rito Escocés Antiguo y Aceptado.
La carta patente fue otorgada a Olegario G. Cantón, Domingo Evia, Isidro González, Adolfo Cisneros, Luis García M., Luis Serrano y Carlos L. Tapia. En el siglo XX, se conformó la Gran Logia “La Oriental” el 24 de abril de 1913, con las logias masónicas “Renacimiento” No. 1, “Ermilo G. Cantón” No. 2 y “Galileo” No. 3. Esta Gran Logia (con jurisdicción en Yucatán y Campeche y Quintana Roo, así como Belice) trabajó en el desaparecido edificio masónico que estaba situado en la calle 59 con 64 y 62 del centro histórico de la capital yucateca.
El 24 de junio de 1923 se autorizó la formación de otra Gran Logia de estado, denominada “La Peninsular”, integrada por las logias masónicas “Estabilidad” No. 12, “Fiat Lux” No. 14 y “Fénix” No. 17, con jurisdicción en Yucatán, Campeche y Quintana Roo.
De esta Gran Logia surgiría otra del mismo nombre, y se fusionaron tres grandes logias en Yucatán en algún momento de los años 20 del siglo XX. Finalmente, el 14 de septiembre de 1928, por medio de una asamblea masónica, los integrantes de ambas grandes logias yucatecas mejoraron el rumbo de los trabajos masónicos mediante su unificación.
Así, se conformó la Gran Logia Unida “La Oriental Peninsular”, producto de la fusión de todos los talleres masónicos existentes en ese entonces en una sola Gran Logia.