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Una familia conflictiva de Molas, comisaría de Mérida, encabezada por el abuelo, sus hijos y sus nietos, el domingo pasado, en venganza porque uno de los integrantes estaba perdiendo una pelea, se introdujeron al domicilio del progenitor del contrincante y rompieron todos los cristales, los muebles, le prendieron fuego a una cama y alimentaban la lumbre con la ropa que sacaron de dos roperos, destruyeron todo lo que encontraron a su paso.
Resulta que el domingo pasado por la noche “Tuti” y Jorge Andrei Loeza, (a) “Pive”, estaban ingiriendo bebidas embriagantes y empezaron a discutir, de las palabras pasaron a los puñetazos y como “Tuti” iba perdiendo la pelea a puño limpio intervinieron sus familiares, quienes le arrojaron piedras a “Pive”, quien corrió hacia su domicilio para protegerse.
Pero en su huida le arrojó una botella a “Tuti”, quien la esquivó y para su mala suerte el envase le pegó en la cabeza a Manuela Chan Chan, lo que enfureció a su progenitor, don Concho Chan Dziu, conocido como “El Abuelo”, quien encabeza a la familia.
Don Concho se armó con hacha y seguido por Manuela Chan Chan, su cónyuge Gabriel Herrera Llanes, “Tuti”, “Coco”, “Pañales”, Elberth, Angela, Gadiela, Yesmi, “Papo”, “Roli” y “Lalo”, se dirigieron a un predio sin número de la calle 23 entre 16 y 20 de dicha comisaría, una casa de color naranja, propiedad del señor Jorge Fidencio Loeza Chan.
Abrieron la reja y entraron a la terraza, “El Abuelo” intentó derribar la puerta de la entrada con el hacha, pero no lo logró, sin embargo, pudieron abrirla y una vez en el interior le echaron gasolina a una cama y le prendieron fuego, voltearon dos roperos, sacaron la ropa y la arrojaban a la lumbre.
Mientras tanto otros se dieron a la tarea de romper todos los cristales de las ventanas, incluidos 7 paños ahumados de 2 metros por 1.50, le prendieron fuego a otra cama, rompieron tres televisores pantalla de plasma, uno de 50 pulgadas y dos un poco más chicos, dañaron 4 ventiladores, 2 de techo y 2 de pedestal, voltearon y dañaron una secadora de ropa, un refrigerador, 4 hamacas, 3 roperos, de donde sacaron la ropa y la que no quemaron la dejaron regada en el piso, entre muchas otras cosas.
Loeza Chan afirma que los policías asignados a la comisaría no intervienen porque enamoran a las mujeres de la familia conflictiva, sin importarles que sean menores de edad, según el entrevistado todo el pueblo tiene conocimiento de dicha situación.
Agregó que con ayuda de los vecinos lograron apagar el fuego y al día siguiente, el lunes, se presentó a la agencia del Ministerio Público que se encuentra a un lado de los Juzgados e interpuso la denuncia C-1/P-2/603/2018, el martes los peritos de la Fiscalía General del Estado realizaron la inspección ocular y le indicaron que Jorge Andrei Loeza debería presentarse a declarar para integrar la carpeta de investigación.
El entrevistado manifestó que se pasó más de 30 años trabajando para poder adquirir sus partencias y tener la casa a su gusto, y en una noche la familia del “Abuelo” destruyó todo y exige que se haga justicia.
(Fernando Poó Hurtado)