Violento sujeto hirió a su pareja

Una mujer fue agredida por su pareja en el interior de una cuartería de la colonia Héctor Pérez Martínez, donde presuntamente el marido reclamó por un caso familiar, pero presuntamente tenía un arma de fuego en la mano.

Los hechos se registraron ayer por la madrugada, alrededor de las 05:45 horas, cuando dentro de la cuartería la pareja escenifica un escandaloso pleito, por lo que vecinos de la calle 49 entre 54 y 56 de la colonia Héctor Pérez Martínez pedían la intervención de alguna unidad de emergencia.

Al lugar arribaron policías municipales y encontraron a la mujer en la banqueta, donde pedía ayuda ya que sangraba del rostro y tenía su ropa bañada en sangre.

Ante ello, los agentes policiales pidieron una ambulancia, y minutos más tarde arribaron socorristas de la Cruz Roja para brindar los primeros auxilios a la dama, quien debido a las contusiones y laceraciones en el brazo y rostro, requería de traslado de emergencia al Hospital General.

Golpeador de mujeres

Hijas de la agredida llegaron hasta el lugar y mencionaron a los agentes que el hombre que la había agredido era su actual pareja sentimental, y que esta no era la primera vez que la golpeaba, ya que se trata de un sujeto violento.

La mujer lesionada al no poder sacar nada del cuarto, sus dos hijas se armaron de valor e ingresaron por las llaves de un automóvil, pero supuestamente fueron amenazadas por el hombre con un arma de fuego.

Policías de “adorno”

Cabe señalar que a pesar de las advertencias de las hijas de que su padrastro era violento y tenía un arma, los agentes hicieron caso omiso, pues mencionaron que ellos no podían ingresar a la cuartería si no tenían una orden de cateo por parte de un juez, y al estar armado ponían en riesgo su propia vida.

La agraviada fue trasladada al Hospital General para su atención médica, en tanto que los elementos policiacos solamente recabaron datos y se retiraron del lugar al pretextar que no podían hacer nada más, pues el hombre se encontraba dentro de su propiedad.

(Texto y fotos: Brayan Zavala)