Se incrementa el número de infracciones por exceder los límites de velocidad en el Anillo Periférico: el objetivo es reducir la cantidad de accidentes viales.
Debido al número de salidas de camino, colisiones y volcaduras con lesionados, pérdida de vidas humanas y cuantiosos daños materiales, los patrulleros de la Secretaría de Seguridad Pública asignados a la vigilancia de la vía rápida tienen instrucciones de aplicar el reglamento de tránsito sin restricciones de algún tipo, trátese de quien se trate, y todos los días infraccionan a decenas de conductores que conducen con velocidad inmoderada, rebasando los límites permitidos y poniendo en riesgo su integridad física y la de otros conductores.
Ayer domingo por la mañana, los patrulleros interceptaron a la altura del kilómetro 37 del arroyo exterior de la vía rápida un Ford de color gris plata, placas ZBM-002-A, que transitaba con exceso de velocidad.
Sin embargo, los uniformados no se imaginaron que se trataba de un vehículo oficial conducido por una fémina que portaba un chaleco de color negro, con las siglas PEI (Policía Estatal de Investigación).
La infractora descendió del vehículo para ver el número del carro-patrulla, al parecer para informarle a sus superiores de la situación en que se encontraba, pero cuando se percató de la presencia de POR ESTO! de inmediato se despojó del chaleco para ocultar su identidad; sin embargo, no se salvó de la infracción correspondiente, le entregaron su boleta y se retiró.
Pero no todos los conductores están conformes con la actuación de los patrulleros, como le sucedió al señor Carlos Chuc Pech, quien conducía un Mitsubishi tipo Lancer, de color blanco, matrícula ZAE-389-A, quien fue interceptado por los tripulantes del carro-patrulla 8009 de la SSP, a la altura del kilómetro 23+500, también del arroyo exterior del Periférico.
El señor Chuc Pech aseguraba que transitaba a 90 kilómetros por hora e indicaba que se percató cuando los patrulleros se incorporaban a la vía rápida y metros adelante le dieron alcance, le indicaron que detuviera la marcha y le señalaron que transitaba a 110 kilómetros por hora y que le levantarían la infracción respectiva.
Poco después llegó como apoyo la tripulación de la unidad 6047, también asignada al Periférico.
El conductor del Mitsubishi argumentaba que el radar de la patrulla esta en la parte de atrás y que los policías no tenían forma de medir la velocidad a la que transitaba, no obstante les entregó su licencia para conducir y la tarjeta de circulación del automóvil; molesto, filmó con su celular a los agentes y a las patrullas.
Uno de los oficiales, de apellido Quintana, le solicitó que firmara la infracción y que cuando acudiera a pagar la boleta le podía externar su inconformidad al Juez de vialidad, y que este le podría mostrar las imágenes del radar en donde figuraba la velocidad a la que transitaba.
Chuc Pech firmó la boleta que indicaba que transitaba a 111 kilómetros por hora, antes de que los patrulleros se retiraran le preguntamos al oficial que se encontraba en la unidad 8009 respecto a la ubicación del radar del carro-patrulla para que lo escuchara el inconforme, pero el policía que conducía se limitó a cerrar el cristal y arrancar a toda velocidad.
(Fernando Poó Hurtado)