Un presunto delincuente que se dedicaba a realizar pedidos a los repartidores en moto, de los denominados “mandaditos”, para después atracarlos, fue amarrado a una palmera y golpeado por un grupo de motociclistas repartidores, pues éstos llevaban varios días intentando detener al sujeto, al que acusan de estafarlos e intento de robo.
Cerca de las 19:40 horas de ayer, el supuesto estafador realizó un nuevo pedido de comida por medio de los números telefónicos de los repartidores en moto.
El ladrón pidió una orden de comida a la avenida Belisario Domínguez por Quintana Roo, por el campo de fútbol de la zona.
Según testigos, un repartidor llegó para entregarle la orden, pero el maleante lo amagó con un cuchillo y le exigió que le entregara el dinero y la comida que minutos antes había pedido.
El motorepartidor que ya tenía guardado el número del sujeto antes de entregar la orden, descubrió que se trataba del mismo sujeto que había sido reportado por otros compañeros, por lo que pidió apoyo y no tardaron en llegar en su auxilio otros repartidores.
El maleante al ver que era cercado, intentó huir, pero fue detenido y amarrado con una soga, para luego recibir una andanada de golpes y finalmente quedar atado a una palmera.
Tras el escarmiento, los repartidores llamaron a la policía para entregar al estafador, pero con la advertencia de que si no llegaban los agentes lo antes posible, golpearía al sujeto hasta hacerlo sangrar.
Al lugar llegaron “pepos” para asegurar al “cliente”, lo desataron y se lo llevaron al Ministerio Público, donde quedaría bajo las órdenes de un juez.
Al respecto, repartidores en moto informaron a los policías que este sujeto se dedicaba a atracar a sus compañeros, pues pide un servicio y al momento de hace la entrega, el estafador los ataca con algún tipo de arma y los despoja del dinero y del pedido.
(Texto y fotos: Brayan Zavala)