Los Juzgados de Control del Centro de Justicia Oral de Mérida lucieron ayer prácticamente vacíos, la mayoría de las funcionarias del Poder Judicial se unieron al “Paro Nacional un Día sin Mujeres” y no acudieron a sus centros de trabajo, pero la justicia no descansa y las integrantes de los Tribunales Primero y Segundo de Enjuiciamiento continuaron con el desahogo de pruebas en dos casos, uno relacionado con el millonario desfalco a las arcas del Fondo Auxiliar del propio Poder Judicial y el otro por delitos de privación ilegal de la libertad y violación agravada.
La mayoría de las jueces y demás funcionarios del sexo femenino del Poder Judicial decidieron no acudir a sus centros de trabajo sin que por ello tengan alguna represalia de parte de sus superiores, así se determinó en los altos mandos.
Esa situación se observó en otras instituciones y dependencias como la Fiscalía General del Estado, Ministerios Públicos y hasta bancos, donde se destaca que el 60 por ciento de su personal en sus sucursales son mujeres, por lo que se sumaban al movimiento.
En un recorrido por los módulos de placas y licencias se pudo observar que el personal femenino cumplía con sus funciones de atención al público, no participaron en el movimiento, incluso en las filas se apreciaban a varias mujeres con documentos en mano, que aprovecharon el día para realizar sus trámites como lo son cambios de propietario, canje de matrículas, pagos de multas, etc., logrando con ello la obtención de los beneficios gratis y del 50 por ciento.
En las calles se podía ver que la necesidad del poder adquisitivo es mayor al del movimiento convocado y a pesar de que las mujeres apoyan el objetivo de erradicar la violencia hacia la mujer, hacia las niñas, los abusos sexuales, homicidios y feminicidios, había que trabajar para llevar el sustento diario a la casa.
Se veían puestos de venta de cochinita, tortas, morcilla, frutas y verduras, a cargo de mujeres, en las tiendas “Oxxo” las empleadas estaban al pie del cañón, ni modo hay que trabajar, comentaron, no obstante en la convocatoria se exponía que el “Nueve ninguna se mueve #Un día sin nosotras, Paro Nacional, ni una mujer en las calles, ni una mujer en los trabajos, ni una niña en las escuelas, ni una joven en las universidades, ni una mujer comprando.
Lo cierto es que en las calles de Mérida sí había un buen número de mujeres realizando una serie de actividades.
(Armando Gamboa Romero)