La Fiscalía General de la República todavía investiga al ex administrador de la Aduana de Progreso, Guillermo Calderón León, por denuncias presentadas por la Unidad de Inteligencia Financiera (UIF) de la Secretaría de Hacienda, que sospechó de corrupción y enriquecimiento ilícito debido al contrabando de efedrina y fentanilo, sustancias usadas para la elaboración de drogas sintéticas.
Calderón León dejó la Aduana el pasado 31 de enero y en su lugar está Ronald Sánchez Celis, pero los hechos se siguen investigando según lo declarado hace unos días por Santiago Nieto Castillo, titular de la UIF.
Se hizo una revisión del actuar de los administradores aduanales que, de acuerdo con una medición del modelo de riesgo que tienen las autoridades, aparecieron con una calificación alta en un posible lavado de dinero, dijo el funcionario.
“Ya se presentaron dos denuncias, en el caso de Tuxpan y en el caso de Progreso, y una tercera de un agente aduanal, seguimos integrando investigación respecto a otras cuatro aduanas. De acuerdo con nuestro modelo de riesgo han salido seis personas que pudieran tener un riesgo en tres casos los funcionarios ya no trabajan”, indicó.
De febrero a abril la UIF presentó tres denuncias penales por posibles hechos de corrupción y operaciones de lavado de dinero en las aduanas de Progreso, Yucatán; Tuxpan, Veracruz y Mexicali, Baja California.
Además, la Secretaría de Hacienda a través de la UIF mantiene bajo la lupa por sospechas de corrupción a las aduanas de la Ciudad de México, Guanajuato y Ensenada.
Nieto señaló que las aduanas son desde hace muchos años la puerta de entrada para múltiples productos y objetos ilegales debido a la permisividad que existe en las mismas, casi siempre fomentada por la falta de perfiles adecuados en las aduanas y la corrupción.
Cabe anotar que a principios de año, cuando se destapó la cloaca en las aduanas, Calderón León rápidamente salió a declarar a varios medios de comunicación que era inocente de las acusaciones de corrupción, enriquecimiento ilícito, sobornos y permitir a la mafia china meter efedrina y fentanilo.
Según él, se trata de intereses oscuros detrás de las Aduanas y afirmó que seguía en su cargo, pero lo removieron el pasado 31 de enero. La UIF de la SHCP documentó que en el caso de Progreso se trafica con efedrina y fentanilo de la República Popular de China.
Sin embargo, en su defensa, el anterior administrador de la Aduana dijo que no hay ruta directa con ese país de Asia y que todo se revisa con rayos equis.
Cabe anotar que Calderón León fue nombrado administrador de la Aduana en abril de 2019 y en agosto de ese año fue denunciado por cobrar sobornos y permitir el tráfico de contenedores con maderas preciosas.
(Rafael Gómez Chi)