Unos niños descubrieron un cadáver en estado de descomposición que flotaba en un pozo al que fueron a buscar agua la tarde de ayer, en un predio de la colonia Santa María en la calle 58 entre 35 y 37 de Tizimín.
Según los menores, después de su jornada de trabajo acudieron a la oquedad y hacer el hallazgo fueron a informar a su abuela.
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Junto con otros vecinos regresaron, usaron sus celulares para iluminar el pozo de 18 metros de profundidad para que los adultos se cercioraran que se trataba de un cuerpo ya en putrefacción.
Los vecinos informaron a las autoridades. Acudieron al predio bomberos, agentes de la Secretaría de Seguridad Pública (SSP) y Policía Municipal.
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Algunos de los colonos dijeron que probablemente se trate de un joven apodado Chano, quien es aficionado a las bebidas embriagantes, cuyos familiares comentaron que la última vez que lo vieron fue el viernes, cuando le dijo a su mamá que iría a trabajar, pero sus herramientas y ropa las tenía en la casa.
En la vivienda donde se ubica el pozo habita una abuelita, su hija y los dos menores que hicieron el hallazgo. Conocidos expresaron que la familia vive en situación de pobreza y consume agua de pozo, a pesar del peligro latente de alguna infección intestinal.
Hasta el cierre de la edición no habían sacado el cuerpo, pues se espera la llegada de representantes de la Fiscalía General del Estado para las primeras indagatorias.
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GH