Una fémina terminó con varias lesiones luego de sufrir una colisión vehicular en la carretera federal Mérida-Progreso provocada por una combi con un conductor con problemas de salud.
El infortunio se registró a las diez de la noche de este jueves cuando Aracelly E. A. C., de 43 años de edad circulaba a bordo de un auto Matiz con placas de circulación YZY-11-E en el carril intermedio de este tramo sobre su kilómetro 18 hasta que fue golpeada por alcance por un colectivo que al parecer intentó hacer una maniobra para rebasar al carro.
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Como resultado, el carro de la fémina terminó en las áreas verdes de en medio de las vías de la carretera. Llamó la atención que el medio de transporte no se detuvo para que su chófer se haga cargo de las responsabilidades pertinentes, sino que siguió su paso rumbo a Progreso a velocidad alta.
De inmediato, se procedió a implementar un operativo de seguridad para retirar a la mujer que permanecía adentro del automóvil. Para ello también fue necesario que llegara al punto de colisión una unidad ambulancia de la SSP y la cruz roja delegación Progreso, sin embargo la mujer respondió a los estímulos de los paramedicos en turno y accedió a uno de los vehículos de asistencia en urgencias médicas para ir a un hospital privado del puerto.
El carro quedó irreconocible en su estructura, siendo la reposición de los daños materiales lo que alegaban los familiares de la dueña que comenzaban a llegar de manera gradual al sitio de la tragedia. Tampoco faltaron los testigos que horrorizados vieron el choque que pudo costarle la vida a la mujer.
"Vi a mi hermana y pude darme cuenta que se encontraba bien, en sus cinco sentidos y eso me tranquilizó un poco, pues padezco diabetes. Fue un accidente bastante grave y por milagro se salvó" expresó Edith Arista, quien de paso aseguró que su consanguinea se dedica a la vida militar en la armada de México.
Cerca de las diez de las once de la noche se presentó un sujeto de la tercera edad a bordo de una camioneta marca Nissan, aproximándose al lugar donde estaba el grupo de familiares, dando a conocer que su chófer tuvo afectaciones de salud y eso lo hizo perder el control de la guía, aunque no por ello se deslindaba el permisionario de los gastos que correrían por el choque.
Durante espacio de dos horas permaneció el lugar bajo la vigilancia de agentes la Guardia Nacional, esto hasta que llegó una grúa para levantar el automóvil con el consentimiento de los allegados de la fémina que tuvieron asesoramiento de la aseguradora del carro.
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