Campeche

'Clandestino” de comisario disparó índices de violencia

Habitantes del ejido de Don Samuel señalan el abandono de las autoridades ejidales de esta región perteneciente al municipio de Escárcega, pues ante los próximos comicios del 18 de noviembre, ya hay quienes pretenden llegar al poder e incluso hay quienes buscan reelección, pero lo cierto es que sólo buscan quedarse con las ventas de los Programas de Mejora.

“Estos programas permiten al comisario municipal que venda cerveza y organizar fiestas que sólo incrementan el número de jóvenes con vicios y que se dediquen a delinquir, generado un ambiente de inseguridad”, expresó Joaquín Asencio Jiménez.

En las zonas rurales las autoridades organizan ventas, fiestas o festivales de las cuales se generan ingresos que deberían ingresar a la tesorería y con ello hacer obras de beneficio para la comunidad; sin embargo, en muchos casos prefieren que quienes manejan recursos sean sus amigos o familiares, los que finalmente se vean beneficiados.

Denuncia

Por ello, los habitantes elaboraron un escrito en el que detallan varias irregularidades en la comunidad de Don Samuel, señalan que el actual comisario nunca hizo nada por su comunidad y busca su reelección, cuando el señor Fernando Maldonado sólo se habría dedicado a ver por sus intereses personales.

“El comisario sólo se dedicó a manejar las ventas de la Junta de Mejora, vende a todas horas cerveza e incluso de forma clandestina a deshoras de la noche, pero lo peor es que se vende a menores de edad, esto ha generado muchos robos en la comunidad.

Asimismo, prometió muchas cosas y nada cumplió, nunca el pueblo pudo tener alumbrado, pese a que las ventas que se hacen en la Junta de Mejora eran para eso, pero sólo lo usó para negocio familiar, ni siquiera fue capaz de limpiar el panteón.

El tanque de agua elevado nunca se limpió, incluso la misma Comisión Nacional del Agua (Conagua) mandó un memorándum en donde se le hacía la observación que debía limpiarlo cada cuatro meses; sin embargo, nunca lo hizo.

Nunca se tomó en cuenta al pueblo, como autoridad no comunicaba nada, su misma familia es la que hace todo, no tomó en cuenta a la directiva, sólo vendían cervezas; todo lo que se vendía en los bailes lo hacía junto con su familia, fue un negocio familiar”, acotó Asencio Jiménez.

Por último, denunció que hay grupos que se dedican a delinquir sobre todo por las noches, y cuando los afectados van a decirle al comisario, éste les responde que él no puede hacer nada. “Incluso los pobladores nos estamos organizando para hacer vigilancia por las noches”, finalizó.

(Texto: Ignacio Morales / Fotos: Especial)