ICH EK, Hopelchén, Cam., 5 de septiembre.- Próxima a concluir la recolección de calabaza en los mecanizados y speques de la variedad chihua que no se ha dado un precio oficial que reditúe por los gastos que se generó para lograr la cosecha, los compradores no dan un precio accesible para comercializarla, mencionó Julio Poot Uitz, quien aseguró que el kilo la ofertan a 35 pesos y muchos no la quieren vender hasta que suba el precio, detalló.
La producción de la chihua fue menor que el año pasado, es por ello que se desplomó el precio y ahora la quieren adquirir a 35 pesos y la menuda a 50 pesos, todavía mucho más difícil, pues en su mayoría la usan para los alimentos de la casa, desde al momento que está reverdeciendo, aparte se realiza dulce con ello y no se desperdicia nada, mientras que la chihua la cascara se pudre en el campo y no es apta para los animales.
El líder campesino externó que pocos son los que no han culminado el corte de la calabaza, algunos en la entrada de su domicilio lo secan, pues primero la lavan para quitarle la baba, después la extienden para el secado, luego la embolsan y tratan que no esté nada húmedo, por lo que varios labriegos de Ich Ek tienen de 10 a 20 bolsas almacenadas y esperan que llegue hasta los 40 pesos el kilogramo de la pepita, de lo contrario seguirán esperando, aclaró.
Poca calabaza se logró sacar en Dzibalchén, Bolonchén de Rejón, pues en Katab se siniestró, igual que en Iturbide, sólo en Ramón Corona donde ha pasado la precipitación pluvial fue donde cortaron el inicio de mes y la misma situación, no la comercializaron hasta superar los 40 pesos el kilo de la pepita, pues existen intermediarios que tratan de robar en la báscula, la calzan con una tablita, aparte que es barata, por lo que la gente campesina debe buscar una ayuda para que no lo sorprendan, resaltó.
(Jorge Amado Caamal Ek)