Cuarta transformación va en serio

HOPELCHEN, Cam., 9 de enero.- La cuarta transformación del país va enserio y las pruebas fehacientes son las consultas ciudadanas que tienen que ver con la construcción de infraestructura, como el Tren Maya, creación de programas como el de reforestación y uno de los puntos claves, como es la lucha contra la corrupción que se está dando en la Empresa “Productiva” del Estado, Petróleos Mexicanos (Pemex).

Afirmó lo anterior el secretario general del Gobierno Nacional de Pueblos y Comunidades Indígenas de México, Filiberto Kú Chan, agregando que hay que respaldar el proyecto del Presidente Andrés Manuel López Obrador.

Abunda que respeta la opinión de representantes y simpatizantes del Ejército Zapatista de Liberación Nacional (EZLN), pero no los comparte, ya que el Estado de Chiapas es rico en atractivos naturales, históricos y culturales, y el paso del Tren Maya por su territorio permitirá detonar todo tipo de turismo, entre ellos el ecoturismo, turismo de aventura, extremo, cultural, educativo y científico.

No se puede negar la oportunidad a los chiapanecos a la participación en este medio de transporte que permitirá también diversificar las actividades económicas y productivas.

Reconoció que el Sureste del país está rezagado con respecto al Norte y ahora es tiempo de aprovechar todas las oportunidades que se presenten para impulsar el desarrollo.

La Península de Yucatán ofrece esas oportunidades, ya que cada uno de los estados que lo integran, Quintana Roo, Yucatán y Campeche, cuentan con los atractivos suficientes para la industria turística, en el entendido que en su conjunto ofrecen de todo; playas, cultura, historia, servicios, cenotes y espacios para la espeleología.

Sostuvo que el combate contra la corrupción es una urgencia y qué bien que comenzó en Pemex, ya que están saliendo al descubierto complicidades que dan cuenta que en el negocio ilegal de la venta de combustibles estaban involucrados funcionarios, sindicato y empresarios gasolineros, y lo más lastimoso que los encargados de la seguridad y en la logística para la distribución de los hidrocarburos también estaba enquistada la podredumbre, en otras palabras, “las llaves de la iglesia las tenía el Diablo”.

Hay gente que se desgarra las vestiduras por la escasez de combustible en estados del centro del país, pero muy pocos hablan de que ello mismo da cuenta de que el huachicol estaba presente dentro y fuera de la empresa monopólica.

“La escasez evidencia que alguien informaba del tipo de combustible que se distribuían por los ductos y no se detectaba a pesar de las modernas tecnologías; estaciones de servicio compraban el producto de manera ilegal y ello se prueba con la falta de las gasolinas, debido a que ahora tienen que comprar legalmente el producto y al cerrarse los ductos la demanda del surtido rebasa la capacidad del transporte de los hidrocarburos”, concluyó Kú Chan, quien reforesta en un predio ejidal en Chunchintok.

(Jorge Alberto Uc Moreno)