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Tras la salida deshonrosa de Carlos Romero Deschamps, los secretarios generales de las secciones petroleras ya deben ir preparando maletas y su defensa legal por la serie de delitos cometidos en contra del sindicalismo y la nación, declaró el representante regional de la Unión Nacional de Técnicos y Profesionistas Petroleros (UNTyPP), Manuel Hinojosa Jáuregui.

La salida de Romero Deschamps de la dirigencia nacional del Sindicato de Trabajadores Petroleros de la República Mexicana (STPRM) es una buena noticia para el sindicalismo mexicano, pues se abre la posibilidad de democratizar al que quizá es una de las organizaciones obreras más importantes de Latinoamerica.

Con la huida de Romero Deschamps inicia una nueva historia para el sindicalismo petrolero, institución que nació para servir al país, pero fue envilecida por líderes obreros corruptos.

Romero Deschamps y sus secretarios generales hicieron mucho daño al sindicalismo mexicano, a Petróleos Mexicanos (PEMEX), pero sobre todo a la nación.

Romero Deschamps y sus secuaces cometieron toda clase de raterías en agravio de los petroleros y la noble empresa nacional que es PEMEX, pero el delito mayor que cometieron es el haber sido cómplice de los gobiernos corruptos.

“Yo en lo particular no soy partidario del perdón total; Romero Deschamps debe pagar por los agravios cometidos en contra del sindicato petrolero y en contra de nuestra sociedad.

“Los delitos cometidos por este criminal no deben quedar impunes. Todo México sabe que hay suficientes carpetas de investigación iniciadas en contra de Romero Deschamps y sus secretarios generales.

“Sería muy oprobioso para los mexicanos que este criminal se vaya a descansar y gozar el producto de su corrupción. Este individuo no merece la indulgencia del gobierno y de la clase obrera. Delincuentes como él deben ser puestos a buen resguardo para que no sigan procurando el mal”, dijo Hinojosa Jáuregui.

“Las reformas que se hicieron a la Ley Federal del Trabajo resultaron ser un mandato lapidario para los líderes sindicales corruptos como Romero Deschamps, pues las enmiendas se enfocaron en el tema de la democracia sindical. Era muy difícil que estos líderes corruptos prevalecieran, tarde o temprano iban a caer”, opinó el petrolero jubilado.

Hinojosa Jáuregui manifestó que ahora los petroleros afiliados al STPRM tienen la oportunidad de tener una vida sindical plena. Asimismo, aunque reconoció que habrá resistencia al cambio y que no será fácil rescatar al sindicato petrolero, se está ante la posibilidad de un cambio real.

El petrolero no descartó que tras la salida de Romero Deschamps, los dirigentes corruptos pongan en marcha maniobras desestabilizadoras y que incluso algunos secretarios generales maniobren para tratar de encubrir sus corruptelas.

En el caso de Campeche, Hinojosa Jáuregui consideró que los dirigentes petroleros dejarán una deuda enorme, pues en vez de ser factor para el progreso del Estado, se convirtieron en los peores enemigos de los campechanos.

Por otra parte, el sindicalista manifestó que no estaría de más que el Gobierno Federal intervenga al STPRM y a sus secciones locales, ya que al menos en Carmen ha corrido la versión de que los secretarios generales ya iniciaron su mudanza y no dudarán en cargar con parte del patrimonio sindical.

(Joaquín Vargas)

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