Trabajadores de la industria petrolera siguen viviendo un viacrucis por la corrupción que imperó en la era de Enrique Peña Nieto y que dejó una crisis económica que hoy enfrenta Petróleos Mexicanos con la falta de pagos a proveedores.
Sin embargo, los mismos obreros señalan que el empresario Rodolfo Alfonso Esquivel, del Grupo Roales, al momento de licitar un contrato con PEMEX debió de comprobar que tenía capital y los recursos para enfrentar cualquier problemática, pero sólo se lavan las manos y no les dan sus catorcenas desde hace tres meses, por ello harán huelga día y noche afuera de las oficinas de dicha compañía.
Los empleados pasaron todo el día del lunes y la madrugada del pasado martes durante el aguacero a las puertas de la empresa, de la cual el dueño ni siquiera se ha apersonado para entablar un diálogo.
Los mueven
sus derechos
Denuncian la falta de pago por parte de la empresa del Grupo Roales, quienes adeudan hasta tres meses de salario, por ello, continúan con su lucha a las afueras de las instalaciones de la empresa, piden la intervención del Gobierno Federal pues hay muchas anomalías por parte de dichos empresarios.
De acuerdo a los empleados, han tratado de la mejor manera buscar el diálogo sin que el empresario quiera acceder, por lo que piden que Petróleos Mexicanos aclare si existe un adeudo con tal compañía y se les paguen sus salarios, pues han tenido que empeñar todo y prestar dinero para sobrevivir, pero ya no les alcanza ni nadie quiere darles dinero a crédito.
“Estamos empeñando nuestras cosas y hasta problemas tenemos con nuestras familias, nosotros sólo estamos pidiendo que nos atiendan y que estamos dispuestos al diálogo, sabemos que tienen oficinas en la ciudad de México y desde allá podrían estar operando, mientras nosotros acá en Carmen es donde estamos pasando toda esta situación”, señaló César Iván Olvera.
Pisoteados
Asimismo, dijo que estas empresas tratan al trabajador como basura, pues si uno de ellos no quiere subir porque no se les están cumpliendo sus pagos, lo que hacen es contratar a otros y despedirlos sin pagarles, pues para ellos no son indispensables.
Cabe mencionar que los empleados de dicha empresa amenazan con tomar la calle 56 en forma de protesta para que las autoridades apoyen a los trabajadores, pues al parecer han estado siendo amedrentados con policías para que se retiren de la compañía que les adeuda sus salarios.
(Texto y fotos: Ignacio Morales)