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Mega proyectos solares suman presión a la ANP

Apenas en un año, cuatro mega proyectos de parques fotovoltaicos solares han sido presentados ante la Secretaría de Medio Ambiente y Recursos Naturales (Semarnat) para su instalación en el municipio del Carmen, demarcación vista con un gran potencial en la generación de energía eléctrica solar por sus características geográficas, lo que ha desatado la ambición de empresas nacionales y transnacionales por esta incipiente industria a nivel estatal.

Se trata de los proyectos de parques solares “La Pimienta”, “La Esperanza”, “Iscali Solar” y “Santa Lucía”, ingresados respectivamente para la aprobación de su Manifiesto de Impacto Ambiental ( MIA) desde el mes de septiembre de 2018 para los dos primeros, y en julio y octubre de este año para los dos últimos. Todos, con ubicación propuesta en el macizo continental del municipio del Carmen, pero en zonas de influencia del Area Natural Protegida “Laguna de Términos”, que implican la remoción de vegetación así como el uso de recursos hídricos para su construcción.

Si bien la energía solar es considerada en la actualidad como una de las más limpias y una opción ante la industria de los hidrocarburos y el agotamiento de los combustibles fósiles, la contaminación y el cambio climático global, los dispositivos de paneles solares también cuentan con un lado negativo y de impacto al medio ambiente que no es abordado debidamente y a profundidad.

Una de las principales contradicciones de la “energía limpia” está en la misma construcción de los paneles solares que requieren la extracción, producción y transporte de materiales, procesos que suponen un mayor impacto ambiental, además de que éstos requieren el uso de grandes extensiones de superficies recolectoras.

Para la fabricación de un panel solar se usan materiales como aluminio, vidrio, acero y silicio, componentes comunes con la industria convencional pero cuya producción implica las energías convencionales, durante su producción se produce un gasto energético que genera residuos, como partículas de óxido de nitrógeno, dióxido de azufre y dióxido de carbono.

A ello se suma que la obtención de silicio de grado metalúrgico es requerida en grandes cantidades para la industria del acero, siendo una pequeña proporción de este material la dedicada a la fabricación de las obleas de silicio. La emisión de polvo de sílice es uno de los inconvenientes, y precisa el uso de compuestos tóxicos.

Por todo ello, se requiere una mayor información sobre la industria eléctrica solar que en el último año está teniendo un auge en el municipio del Carmen, y se encamina su área continental a convertirse en una zona productora de energía “limpia”, pese a que esto conlleve la tala de vegetación y los inconvenientes de las plantas solares con las poblaciones de insectos funcionales a la polinización, como son las abejas que son ya consideradas la especie más importante del planeta.

Proyectos solares

El primero de los proyectos en ser ingresado ante la Semarnat fue el del “Proyecto Fotovoltaico La Pimienta”, por parte de la empresa “La Pimienta Solar S. R. L. de C. V.”, cuyo representante legal es José López Ramírez, el 21 de septiembre del 2018 ingresó su Manifestación de Impacto Ambiental modalidad Regional (MIA-R), cuya resolución fue avalada vía “fast track” el 6 de noviembre del mismo año, semanas antes de que concluyera la pasada administración federal.

“La Pimienta” consiste en la construcción de una planta fotovoltaica para la “generación de energía eléctrica a través de 1 millón 31 mil 940 paneles fotovoltaicos, tendrá una potencia total de 300 megawatts (MW), generando una energía por hora igual a 807 mil 310 Megawattas por hora (MWh). La energía que generará el proyecto será enviada a través de una línea eléctrica a una subestación perteneciente al mismo proyecto, para posteriormente ser elevada al voltaje adecuado para la interconexión con la línea eléctrica de 400kV que pasa por el área del proyecto”.

Según el documento ingresado, se localizará a 10.5 kilómetros de la central termoeléctrica Palizada, ubicada en Santa Adelaida, a 62.5 kilómetros al sur de Ciudad del Carmen y a 19.9 kilómetros del polígono de “Laguna de Términos”.

Su construcción implica la devastación de vegetación secundaria arbustiva de selva mediana, sabana y vegetación secundaria arbórea.

Uno de los puntos que llaman la atención es la construcción de una fosa de aceites, debido a que los transformadores contienen aceite dieléctrico, se contempla una pileta periférica que rodeará a los trasformadores. “Dicha pileta será sellada y sus capacidades serán 110 por ciento del volumen de aceite que pudiera verterse accidentalmente (...) La fosa contenedora estará construida de material impermeable, con un volumen suficiente para contener todo el aceite de un transformador”.

La segunda planta en ser proyectada y avalada semanas antes de que concluyera la pasada administración federal fue el de la empresa “Tequila Solar PV V S. A. de C. V.”, denominado “La Esperanza”, que implica el uso de mi 134 hectáreas dentro de la zona de influencia del Area de Protección de Flora y Fauna.

Su representante legal Flavio Cházaro Ramírez la ingresó el 27 de septiembre del 2018 como Manifestación de Impacto Ambiental modalidad Regional (MIA-R), y también fue aprobado casi inmediatamente para su ubicación a 17.9 kilómetros del polígono de “Laguna de Términos”.

Esta planta requerirá 1 millón 108 mil 800 paneles fotovoltaicos, “la potencia total que se obtendrá del proyecto será de 300 mil kilowatts nominales y alcanzará una producción anual de 807 mil 310 megawatts por hora”.

Igualmente requerirá la construcción de líneas de transmisión eléctrica, así como subestaciones que generarán aceites, por lo que también se deberá realizar la fosa de aceites que aseguran contará con mantenimiento y sellado que evite las filtraciones a los mantos freáticos. El visto bueno para “La Esperanza” se dio con el resolutivo de la Semarnat de fecha 9 de noviembre del año pasado.

El tercero de estos megaproyectos es el denominado “Parque Fotovoltaico Iscali Solar”, promovido por la empresa “Cox Energy”, fue ingresado el 5 de julio de este año, pero ya con la nueva administración federal obtuvo la aprobación condicionada de su MIA modalidad regional el pasado 3 de octubre, pues las nuevas autoridades federales de la Semarnat condicionaron su realización a la consulta con comunidades aledañas para ser implementado.

En el resolutivo se lee que la Dirección General de Impacto y Riesgo Ambiental (DGIRA) “condiciona el desarrollo del proyecto a la presentación del documento que a derecho determine la SENER (Secretaría de Energía) para garantizar que se haya llevado a cabo la Consulta Indígena de manera previa, libre e informada, y a través de la cual se garantice la conformidad por parte de las poblaciones indígenas al desarrollo del proyecto”.

“Iscali Solar” estaría construido en la zona de influencia del Area de Protección de Flora y Fauna “Laguna de Términos”, a lo largo de una corriente natural de agua, dentro de la zona de conservación de primates, y representaría la pérdida de casi cuatro hectáreas forestales. Estos tres proyectos, salvo el último condicionado, ya cuentan con su aprobación para ser iniciados, y aunque suponen grandes inversiones, queda en duda el impacto ecológico que se generará con la “energía limpia”.

Uno más

Por último, la fiebre por la generación de energía solar animó a una cuarta empresa a buscar instalarse en el municipio del Carmen, considerado con gran potencial para la generación eléctrica solar.

Se trata del proyecto de “Central Fotovoltaica Santa Lucía”, este último fue ingresado apenas el 10 de octubre y se encuentra en evaluación, el cuarto proyecto resulta estar vinculado a la empresa transnacional “Energía Aljaval”, originaria de España.

Se pretende desarrollar en un polígono con una superficie de 847.33 hectáreas, este contará con 632 mil 896 paneles fotovoltaicos, sistema colector de media tensión, una subestación eléctrica, caminos perimetrales e internos, e implica la remoción de vegetación de tipo secundaria.

Aunque aún no ha sido aprobado, la insistencia de cuatro proyectos en apenas un año en el municipio del Carmen deja ver el potencia de esta incipiente industria, pero también la escasa información y debate sobre sus efectos positivos y negativos al ubicarse en zonas cercanas a un Area Natural Protegida, así como a las cuencas hidrológicas del río Candelaria y el Usumacinta.

(Texto: Carlos Valdemar /

Fotos: Especial)

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