Las emisiones de humo que despide la planta de recompresión de gas en Atasta Pueblo ha estado provocando una serie de enfermedades a los habitantes de esta comunidad y sus alrededores, enfermedades como cáncer, infecciones de las vías respiratorias, entre otras, además que ha provocado una esterilidad en el campo, dijo Antonio Alcocer Heredia, líder social de dicha comunidad.
Expresó que las familias de las comunidades de la Península de Atasta de forma constante se encuentran con infecciones de las vías respiratorias y aunque los médicos justifiquen esta situación como resfriado, o simples infecciones de vías respiratorias para los pobladores es consecuencia de la actividad que realiza la planta de recompresión de gas, ya que antes que construyeran esta planta, los atastecos gozaban de buena salud.
Además de perjudicar la salud de las familias atastecas, la planta de gas ha emitido contaminaciones al campo y a las lagunas, porque acabó con diversas especies, como almejas, y hoy en día está acabando con la jaiba; en sí la planta de gas en esta comunidad no ha traído ningún beneficio a la población, pues no hay recursos que destine esta planta para hacer mejoras en el poblado, mientras que las familias cada día enferman y los cultivos como maíz, melón, sandía y tomate, entre otros, no logran llegar a la madurez, porque se secan por las lluvias ácidas.
Enfermedades respiratorias
Dijo que a parte que la tierra se ha convertido estéril por la actividad de la planta de gas y se suma la planta de nitrógeno que se encuentra en San Antonio Cárdenas, afectando a niños, mujeres, hombres, y adultos mayores, que hoy en día se encuentran enfermos de la tos, gripa, así como dolores de huesos y eso se debe a la contaminación que está generando las plantas al medio ambiente, ya que el aire que respiran los habitantes de Península les está ocasionando muchas enfermedades.
Expresó que los atastecos desde hace varios años han estado solicitando a los funcionarios de Petróleos Mexicanos (PEMEX), a los gobiernos estatales y a los municipales que se fijen en los habitantes de la Península, a que les hagan justicia por la contaminación que genera las plantas y que está dañando la alud de las familias, pero las autoridades y funcionarios de la petrolera no hicieron nada, y la situación se va agravando en la Península de Atasta.
“Esas autoridades están más preocupados en su futuro político, en su vida personal, en amasar fortunas, aunque esté de por medio la salud de los pobladores, así como del medio ambiente”, señaló.
Severos daños
Finalizó diciendo que necesitan que las autoridades de los tres órdenes de gobierno volteen a ver a los pobladores de esa comunidad, además que los funcionarios de las plantas de gas y nitrógeno se hagan responsables por los daños que están ocasionando, tanto a los cultivos de los campos, así como de la salud de las personas que se han visto afectadas por respirar aire contaminado.
(Texto: Fernando Kantún/Fotos: Fernando Kantún / POR ESTO!)