Amado Yáñez habría comprado Gallos Blancos con el dinero de cuentahabientes de 'Caja Libertad”

El caso del equipo de fútbol Gallos Blancos del Querétaro se suma a la reciente lista de revelaciones a nivel nacional que salpican al empresario Amado Yáñez Osuna, según información consignada en la denuncia del empresario queretano Sergio Hugo Bustamante Figueroa, declaración ante la Fiscalía General de la República (FGR) y la Unidad de Inteligencia Financiera (UIF) que llevó a la detención del abogado Juan Collado Mocelo, a principios de esta semana.

La información a la que tuvo acceso POR ESTO! en la orden de aprehensión contra Collado Mocelo, detalla, entre los muchos casos de presunto lavado de dinero, la relación entre el abogado de poderosos y sus socios en la empresa Caja Libertad Servicios Financieros S.A., con la adquisición del equipo de fútbol Gallos Blancos de Querétaro, la que describe en dos etapas.

La primera, entre 2002 y 2003, cuando el cuestionado grupo de inversionistas adquirió a la escuadra en una maniobra sospechosa de corrupción que involucraría incluso a la Federación Mexicana de Fútbol (Femexfut), según lo relatado por el propio Bustamante Figueroa.

Mientras que la segunda etapa ocurrió durante el 2013, época en la que Amado Yáñez Osuna, a través de su socio y segundo abordo en Oceanografía, Martín Díaz Alvarez, entraron no sólo en el esquema de presunto lavado de “Caja Libertad”, sino también adquirieron Gallos Blancos por 8 millones de dólares, lo que habría significado un defraudo para los ahorradores de la financiera.

Primera etapa

Sergio Bustamante detalla que el equipo fue adquirido por “Caja Libertad”, comprada por el socio de Collado Mocelo, José Antonio Rico Rico, en el año 2002, tras varias reuniones con potentados de aquella Entidad se pactó un precio de 7 millones de dólares, pero fueron pagados mediante un esquema de pagos que establecía que Libertad Servicios Financieros pagaría facturas por servicios tales como construcción, remodelación, entre otras a diversas empresas propiedad de una persona identificada como Tirso Martínez, “El Ingeniero”, actualmente preso en Estados Unidos.

Martínez, quien era el presunto dueño de Gallos Blancos, según la información, también era compadre del narco Amado Carrillo “El Señor de los Cielos”, y fue acusado de lavar dinero del Crimen Organizado mediante equipos de fútbol de la zona del bajío, como el Querétaro, Irapuato, León y La Piedad.

“Con esas facturas íbamos liquidando el importe, en aquel tiempo los ingresos de Libertad Servicios Financieros se limitaban a las aportaciones en forma de ahorro de cada uno de los cientos de miles de socios”, por lo que el dinero de los cuentahabientes sirvió para estas operaciones.

“Finalmente nos hicimos de la propiedad del equipo, nunca aclaramos quien se iba a quedar con el equipo (…) le hicimos ver a José Antonio Rico Rico que la compra de un equipo de fútbol iba a ser mal vista en el ámbito social y financiero, por lo que ese mismo día optamos por hablar con los hermanos Jorge y Alejandro Vázquez Mellado, a fin de que ‘aparentaran’ que ellos habían comprado el equipo”.

Según la declaración de Bustamante Figueroa, los Vázquez Mellado hicieron las gestiones para que la Femexfut acreditara la sospechosa venta del equipo y fuera afiliado a la Liga; gestiones en las que resalta el nombre del abogado panista Diego Fernández de Ceballos.

Segunda etapa

Luego de ser pagado el equipo con el dinero de cientos de miles de socios de “Caja Libertad”, así como de créditos generados de manera ilegal, en el 2013, José Rico Rico era poseedor y dueño del equipo de Gallos, pero lo vende a Amado Yáñez por 8 millones de dólares, cantidad que según Bustamante Figueroa, el dueño de OSA pagó mediante transferencias a paraísos fiscales en el extranjero, por lo que Rico Rico habría lucrado doblemente.

“En más de una ocasión me comentó Rico –se lee en la declaración-, que tenía cuentas en Suiza y en España, cuyos números ignoro”, a donde también habría ido a parar dinero blanqueado a favor de los nuevos socios de “Caja Libertad”, Amado Yáñez Osuna y su segundo abordo, Martín Díaz Alvarez.

La millonaria suma habría sido repartida entre el hoy preso Juan Collado Mocelo y su socio José Rico Rico, pero no sólo por la adquisición de la escuadra queretana, sino también por los servicios brindados a través de la red de presunto lavado de dinero a la que accedieron Yáñez Osuna y Martín Díaz.

(Texto: Redacción / POR ESTO! / Fotos: Especial)