CHAMPOTON, Cam., 16 de agosto.- Resulta indeclinable e impostergable el enjuiciamiento judicial al que deben ser sometidos los ex presidentes de la República, Carlos Salinas de Gortari, Ernesto Zedillo Ponce de León, Vicente Fox Quezada, Felipe Calderón Hinojosa y Enrique Peña Nieto.
Esto es por la dimensión de la rapacería y la atrocidad con la que éstos actuaron en el desempeño de sus funciones, asó lo dio a conocer el activista político, licenciado Rodolfo Salabarría León.
Porque fueron ellos lo que provocaron en el país el despojo y saqueo de sus riquezas y recursos patrimoniales, así como el quebranto de su economía, además de ese marcado retroceso en su desarrollo, amén de inducir, propiciar y proteger el auge de redes criminales organizadas, que ya han cobrado como factura varios centenares de miles de muertos, pero que hoy siguen manteniendo al país y sus habitantes bajo una atmósfera de zozobra.
Donde además impera un ambiente de inseguridad; además como colofón y para colmo a tantas penurias no se debe subestimar las lamentables condiciones de pobreza que priva en más de 50 millones de mexicanos.
Lo anterior resulta todo un contexto donde el propio sentido común los convierte en agravantes para sustentar posibles enjuiciamientos judiciales.
El ex auxiliar parlamentario del Congreso de la Unión, puntualizó que el hecho de que el hoy Primer Mandatario de la Nación, Andrés Manuel López Obrador, se pronuncie en el sentido de enjuiciar a los ex presidentes, donde la propuesta de éste durante la rueda de prensa mañanera, se condujo con respeto es que se pensara en un punto final, solo si la gente lo pedía, que se hiciera una consulta, reformando el artículo 35 de la Constitución y que sean los mexicanos los que decidan.
Si quieren enjuiciar a (Carlos) Salinas, (Ernesto) Zedillo, (Vicente) Fox, (Felipe) Calderón y Peña Nieto.
Aunque la postura del Presidente, López Obrador, es digna de respeto pero por sobre de ésta, siempre deberá prevalecer el principio de los intereses del pueblo mexicano, que hoy exige una aplicación real de los principios más elementales de justicia.
Hoy, el pueblo no acepta más demagogia populista ya no digiere esas dosis de atole con el dedo.
La incipiente Cuarta Transformación que liderea López Obrador, no puede dar cobertura y menos coyuntura a espacios de complicidades y alcahueterías.
La justicia debe aplicarse por parejo a quienes infringieron e infringen la Ley, no existen mexicanos de primera ni de segunda, todos somos iguales ante la ley, es por eso que hoy, con el mandato que le confirieron más de 30 millones de mexicanos a López Obrador, éste no tiene razón válida para oponerse al enjuiciamiento judicial de los expresidente de la República, concluyó.
(Erasmo Cruz Díaz)