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El temor por expresarse y “no recibir nada” es una de las armas que el Gobierno del Estado, sus dependencias y el Ayuntamiento priísta tiene contra el gremio de artesanos que siguen confinados al inseguro Parque Zaragoza, a más de un año de haber perdido su lugar en la extinta Plaza de Artesanías y Gastronomía.

“Las entrevistas las da una persona asignada por acá, nosotros no podemos hablar, no queremos problemas”, fueron las palabras de una vendedora que pidió la reserva de su identidad ante el temor de sufrir represalias al emitir su crítica.

Al igual que esta mujer, varios miembros del gremio de artesanos se negaron a dar su punto de vista abiertamente por miedo a que los hicieran a un lado o sufrir algún tipo de amenaza.

Antecedentes

Dos días después del incendio de la plaza el 25 de julio del año pasado, José Domingo Berzunza, titular de la Secretaría de Desarrollo Económico (Sedeco), emitió declaraciones exageradas de supuestos apoyos para los artesanos damnificados que llegaron varios meses después.

Sus primeras declaraciones hacían alusión a apoyos millonarios que al ser cuestionados en frío por POR ESTO!, fueron reemplazados por miserables 11 mil pesos y créditos.

Aquella noche, 133 artesanos perdieron la mercancía que guardaban en sus locales. Las autoridades aludieron a que el fuego que causó el incendio fue por una veladora que se dejó encendida, dato que también fue corroborado por Protección Civil.

Las autoridades municipales, encabezadas por el entonces alcalde Pablo Gutiérrez Lazarus, acudieron puntualmente unas horas después que fue sofocado el siniestro y permitieron a los comerciantes -los que pudieron- establecerse en el interior del Parque Zaragoza ese día.

Corrupto

Berzunza Espínola, quien compareció hace poco ante el “amañado” Congreso del Estado, siempre fue bueno para los negocios como el que armó hace dos años y por el que fue señalado como el orquestador de desvíos de recursos millonarios para beneficiar a sus amigos del Partido Revolucionario Institucional.

A finales de 2017 salió a la luz la ilícita adjudicación de contratos de la Sedeco por prestación de servicios a empresas yucatecas a nombre Dante Fabre Platas.

La Sedeco además le pagaba un extra como consultor a Fabre Platas y mediante estas adjudicaciones lavó más de 41 millones de pesos; esto, mediante las compañías FC México SCP, Editorial Hashdar y “Cuatros Monos” Consultores.

A pesar que diversos grupos sociales aportaron evidencias a la Auditoría Superior de la Federación (ASF) y a la Contraloría del Gobierno del Estado, a mitad de sexenio los señalados gozan de impunidad.

Con las adjudicaciones de contratos de Berzunza Espínola a sus amigos son la muestra de una evidente red de corrupción equiparable al de la Delincuencia Organizada pero con el nombre de Sedeco.

Fabres Platas es señalado de haber lavado con sus empresas más 41 millones de pesos que salieron del Instituto Nacional del Emprendedor (Inadem), pero esto nunca fue cuestionado.

(Texto y fotos: Redacción /

POR ESTO!)

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