El 2020 quedará marcado en los recuerdos de las mujeres dedicadas a la venta de pulpo cocido por las bajas ventas, parálisis del mercado de comercialización y problemas económicos entre los principales clientes.
La tradición de las pulperitas, con más de 20 años, se ha visto mermada por la pandemia de COVID-19, al grado que las comerciantes siguen reportando pérdidas de hasta 500 pesos semanales por la escasa venta a días de concluir el tercer mes del periodo de captura de pulpo.
La Pulperita María del Socorro Camal, en el mercado “Pedro Sainz de Baranda”, comentó que las ventas de pulpo cocido siguen sin mejorar luego de casi tres meses de iniciar la temporada de captura de pulpo maya en Campeche.
Recordó que estaba acostumbraba a ganar hasta mil pesos si bien le iba por semana, hasta 800 para recuperar lo invertido, pero en este periodo si se logra sacar 500 se debe agradecer a la vida.
Pulperitas del malecón
Las pulperitas la Güera y María García, ubicadas en el malecón de Campeche, detallaron que las bajas ventas son porque mucha gente sigue sin salir de su casa, pese a los avances en el control de la pandemia, lo cual se refleja en bajas ventas.
“La gente que venía para transportarlo a Mérida ya no viene, otros no salen y tampoco solicitan el servicio a domicilio, el principal motivo es la falta de recursos y que muchos se quedaron sin trabajo”, platicaron.
Cabe agregar que en el malecón de Campeche y la Avenida Dársena de las 20 pulperitas un 70 % ya no están laborando por los pésimos resultados, mismos que nunca se habían registrado en más de 20 años de la actividad.
Por David Vázquez