Ciudadanos de la cabecera municipal externaron preocupación debido a que los ríos Palizada y Viejo desbordan agua hacia diversas calles, problema que podría agravarse al paso de las horas, además de que resienten los efectos del Frente Frío Número 17 con chubascos fuertes aislados y evento de “Norte”.
La mayor afectación se localiza en la calle Alonso Abreu y Prolongación Zaragoza, donde el Río Viejo se salió de su cauce e incluso rebasó los costales con arena, por lo que una brigada de empleados del gobierno municipal apiló otra línea para tratar de contener el flujo.
Además, los registros de aguas pluviales hacia el Río Palizada empezaron a filtrar líquido hacia el interior de la ciudad, mientras que los bordos fueron rebasados a la altura del Malecón en partes como la cancha municipal, el Parque La Bienvenida y el mercado, donde el agua se encuentra a media calle, frente a lo que era la sede del Palacio Municipal donde todas las banquetas están anegadas.
La preocupación crece porque el gobierno municipal y Protección Civil constantemente perifonea alertas para que los ciudadanos asentados en las orillas de los ríos o sitios de riesgo pongan a salvo sus pertenencias, y que los albergues se encuentran listos para recibirlos.
Sin embargo, algunos paliceños presumen que las autoridades saben bien que el panorama que se espera para los próximos días no es alentador, ya que, aunque según Conagua el Palizada no subió en las últimas 48 horas, y se mantuvo en 5.84 metros sobre el nivel del mar (msnm), observan es que el avance del caudal hacia el interior de la comunidad, y si el Frente Frio 11 azota con fuertes lluvias, aducen que la situación empeorará.
Endebles
Continúa la alerta de inundación por el desbordamiento del río Palizada dada a conocer desde hace casi dos semanas, situación que empeora debido a que los bordos de protección de encuentran endebles, y aunque el avance del agua ha sido relativamente lento, hay diversas afectaciones en ranchos y viviendas a todo lo largo de la margen del caudal.
Por lo anterior, Protección Civil mantiene operativos para rescate de damnificados; sin embargo, la ciudadanía se rehúsa a salirse de sus casas.
El río Palizada se ubicaba hasta el día de ayer en 5.84 metros sobre el nivel del mar, según el último reporte de la Comisión Nacional de Agua (Conagua), a sólo 6 centímetros de su nivel máximo histórico de 5.90 msnm alcanzado en octubre del 2011, cuando la ciudad fue totalmente inundada y por lo que a partir de esa fecha comenzaron a construirse los bordos de protección.
Al respecto, la Conagua indica que durante las últimas 48 horas se mantuvo estable el nivel del Palizada y que el Usumacinta tuvo un repunte ligero, lo que provoca que continúen los problemas en los bordos al perder su resistencia ante el embate de la corriente.
Debido a lo anterior, autoridades de los tres niveles de Gobierno iniciaron trabajos de reforzamiento y colocaron sacos rellenos de arena para tratar de impedir inundaciones.
Autoridades municipales y de Protección Civil, a través del secretario de gobierno, Javier Zavala Bayona, señalaron que se trata de parar la entrada de agua del Usumacinta al rancho Santa Elena, donde elementos del Ejército, Marina, Guardia Nacional, Policía Estatal Preventiva y Seguridad Pública trabajan con este propósito, ya que de lo contrario también habría cortes carreteros en la vía Palizada-Santa Adelaida de continuar en ascenso el nivel.
Se sabe que esa la única vía de entrada y salida a Palizada y Jonuta, Tabasco, ya que se rompió su carretera, y obligadamente tienen que utilizar la de Santa Adelaida.
El funcionario municipal señaló que hasta ahora se han colocado más de 15 mil sacos con arena, sobre todo en los bordos, mientras que en el camino cosechero de los Playones hay problemas debido a que el Río Viejo invadió parte de la carpeta asfáltica.
Este lunes, la Conagua instaló una bomba para trasegar agua hacia el río en auxilio de familias de los módulos habitacionales Justicia Social, Benito Juárez, colonia Aviación.
Movilización
El presidente de la Asociación Ganadera Local (AGL), Gilberto Cabrales Centeno, señaló que continúa la movilización de ganado hacia puntos más altos debido a las anegaciones en campos de pastoreo.
Esto ha afectado la compra de animales, además de que los productores deben pagar para movilizar el hato, pero no tienen dinero para hacerlo.
Aunque hay respaldo del gobierno del estado con una jaula, y donde el productor únicamente compra el diésel que utiliza el camión, además de silos de maíz, comenta que requerirán más ayuda conforme avance la inundación.
Al momento se han movilizado más de 2 mil semovientes hacia Tumbo de la Montaña, Zapote, Juncal y Santa Adelaida, pero quedan más animales en los ranchos, pero ganaderos reportan mortandad de animales bajos de peso, pues en el traslado a pie algunos no logran llegar.
Por Julio Gutiérrez