Fue un 24 de febrero del 2011 cuando la Secretaría de Turismo federal (Sectur), a cargo de Gloria Guevara Manso, entregó la constancia que acreditaba a Palizada como el integrante 92 del programa “Pueblo Mágico”, y hasta ese momento el único del estado de Campeche, con esto se abría una nueva expectativa y oportunidad de desarrollo económico para el municipio y lo que trajo aparejado diversas obras de infraestructura en la cabecera municipal.
El alcalde en ese tiempo, Vicente Guerrero del Rivero, recuerda que para lograr esta distinción fue producto del esfuerzo de otros gobiernos y sobre todo de personas de la sociedad civil.
Lo primero que consiguieron fue que se decretara a Palizada como patrimonio histórico de Campeche a través del Congreso del Estado, lo que trajo que el Instituto de Antropología e Historia (INAH) tuviera que aplicarse e iniciará trabajos en el reordenamiento del centro histórico y su reglamentación.
Obras
En tanto que el gobierno del estado presidido por Fernando Eutimio Ortega Bernés comenzó con una serie de trabajos de infraestructura de mejoramiento urbano en el Centro Histórico, y se tuvo una histórica inversión de 10 millones de pesos con una mezcla de recursos de los tres niveles de gobierno, que permitió embellecer el Parque Juárez, las calles aledañas al mismo, el mercado público y la pintura de sus fachadas, en todo lo que hoy se conoce como centro histórico.
Posteriormente, vendría la primera etapa para cambiar el cableado eléctrico aéreo a subterráneo, que limpió la imagen de la zona histórica y parte del primer cuadro de la ciudad. En los años posteriores esto avanzó en tres etapas en calles como el Malecón, Ignacio Ramírez y Juárez, las cuales quedaron tal y como lucen hasta el día de hoy.
Belleza histórica
El cronista e historiador José Jesús Espinoza, quien formó parte del primer Comité Ciudadano de Pueblo Mágico, mencionó que uno de los objetivos del programa fue resaltar la belleza natural e infraestructura de las casas con techo de teja francesa, así como el legado histórico del pueblo fue fundado en 1772 por don Pedro Dufau Maldonado, gobernador del Presidio de la Isla del Carmen.
Como parte de este nombramiento de Pueblo Mágico, siguió el mejoramiento de la imagen urbana, para ello, en forma esporádica se da mantenimiento al Centro Histórico y Malecón con pintura, así como edificios principales, pero también se remodelaba el Palacio Municipal, hoy convertido en el museo de la ciudad y biblioteca pública.
Mientras que el nuevo Palacio Municipal se construye donde estaba la Secundaria General y luego el DIF, en estas dos últimas acciones se invertirán cerca de 50 millones de pesos por el actual gobierno del estado.
Primer decenio
En estos 10 años de Pueblo Mágico la infraestructura de la zona urbana ha crecido con obras como la remodelación de parte del Malecón, muelle flotante, iglesia del Señor San Joaquín, repavimentación de las calles Hidalgo, Juárez, Ignacio Ramírez, así como el crecimiento en infraestructura hotelera en un 60 por ciento.
Sin embargo, hasta ahora no se refleja un cambio económico, falta por hacer y más ahora después de un año desastroso por la sequía, pandemia e inundaciones.
Pandemia y creciente
El director de Turismo municipal, Luis Garrido Rodríguez, afirmó que este año ha sido crítico para el sector turístico del municipio, primero con el COVID-19 que obligó a suspender todas las actividades programadas y paralizó la actividad del sector en más del 80 por ciento.
Aunque se empezó vislumbrar una leve mejoría a partir del Semáforo Epidemiológico verde, ahora se enfrenta la creciente del río Palizada, calificada como histórica y de mayor magnitud que la ocurrida en 2011.
El funcionario dijo que al agua afectó principalmente las vías de comunicación, esenciales para el turismo, y que en el caso de la hotelería hay seis negocios que luchan contra la inundación. En total, el 40 por ciento de los 120 cuartos existentes del municipio se encuentran afectados, pues están a la orilla de los ríos Usumacinta y Palizada y otro cercano a los campos comunales, donde persiste la anegación.
Luis Garrido expuso que para el próximo año habrá que reconsiderarse la cantidad de recursos que se destinan para la cabecera municipal, pues se requiere sean mayores para poder reactivar la infraestructura carretera y de los prestadores de servicios, que en el caso de Palizada fueron dos golpes fuertes, casi mortales, al conjuntarse la pandemia y la creciente.
Comentó que una forma de recomenzar es apostar al turismo local, regional y nacional, pues consideró que, debido a la nueva modalidad por el coronavirus, en 2021 es necesario mostrar lo que ofrece la ciudad primeramente a nivel municipal, luego hacerlo a nivel regional, pues es necesario empezar de nuevo y con mayor esfuerzo.
Garrido Rodríguez indicó que una de las fortalezas locales son las cuatro Unidades de Manejo Ambiental (UMA), pero están cerradas desde marzo por disposición del Área Natural Protegida “Laguna de términos” a causa de la pandemia.
Por este motivo, tampoco se realizó el Torneo Internacional de Pesca Deportiva del Robalo, la motonáutica, las festividades del Playón y la Feria anual.
Sin embargo, para el próximo año se tiene proyectado lanzar la nueva página de promoción turística con la creación de la ruta del Tranvía Turístico y que pasará por alguna de las UMA, además de incentivar a la ciudadanía para que visite el muelle flotante turístico, buscar recursos para mejorar la imagen pública del primer cuadro de la ciudad, además de firmar nuevos y ratificar otros convenios con instituciones superiores de educación, para que sus alumnos presten su servicio social en el municipio y así aterrizar el primer festival gastronómico de Palizada, en el cual la materia prima será el mango manila.
Por otra parte, el ecologista Juan Jiménez Lara afirmó que una parte fundamental para recibir la distinción de Pueblo Mágico es la gran variedad de flora y fauna que maravilla a todos los visitantes, por eso dijo que es necesario cuidar todas las especies, pues algunas están en peligro de extinción, porque lamentablemente no hay conciencia por el medio natural de quienes se dedican a la caza del venado.
Cuidar flora y fauna
Señaló que por este motivo es común encontrar ofertas en la calle que venden a 100 pesos el kilo de pulpa del animal, y ahora, con la creciente, la fauna huye de sus escondites y es más fácil depredarla, pero no para alimentarse, sino para comerciar de manera clandestina.
En el caso de la flora, se ha visto la afectación por otro tipo de siembras, como pastizales para ganado.
Juan Jiménez abundó acerca de la actual creciente y previó habrá problemas más severos.
“Destruimos nuestros ecosistemas, es necesario hacer conciencia y que la gente que vive en los márgenes del río no lo tomen como basurero”.
Con relación a la inundación, el comerciante Luis Rosado indicó que cuando baje el nivel del río vendrá lo peor y será necesario que las autoridades fumiguen contra la plaga de mosquitos, además de sanear las zonas afectadas.
Por Julio Gutiérrez