Campeche

Plásticos amenazan vida silvestre

Ser la última generación con la capacidad de revertir la acelerada extinción de especies no servirá de nada si no se crean leyes, donde las grandes empresas creadoras de utensilios o productos envueltos en plásticos, se vean obligadas a cambiar el método de oferta de sus bienes.

Destacó lo anterior la Coordinadora de la campaña Océanos sin Plásticos de Greenpeace México, Ornela Garelli Ríos, al ser cuestionada sobre las investigaciones de que somos la última generación que puede revertir la acelerada extinción de especies, del doctor en biología evolutiva, Fernando Ceballos, finalista de Indianapolis Prize 2020, quien también recibió reconocimiento a quienes contribuyen a conservar animales en riesgo de extinción, y dirigente del Laboratorio de Ecología y Conservación de Fauna Silvestre del Instituto de Ecología de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM).

“Perder biodiversidad y el cambio climático son de los problemas más graves sufridos por la humanidad en estos días, si lo situamos en el contexto de la eliminación de plásticos de un solo uso podemos decir que la contaminación por plásticos está agravando la problemática, porque ocasiona afectaciones en miles de especies a nivel nacional”, comentó Garelli Ríos.

La representante en esta ocasión de Greenpeace México comentó que lo mencionado ocasiona la muerte de más de un millón de aves y cien mil mamíferos al año en México; por lo cual, tal como lo dice Fernando Ceballos, ahora es el momento de preocuparnos por la pérdida de especies, que está ocurriendo a niveles no percibidos anteriormente.

Explicó que una de las especias a nada de desaparecer en el país podría ser la vaquita marina, que está amenazada en menos de 10 ejemplares contabilizados, por lo cual urgió al Gobierno Federal y los gobiernos locales, hacer algo para detener estos problemas.

Plásticos biodegradables no son solución

Asimismo, de las campañas de “Campeche sin Plástico” de la Secretaría de Medio Ambiente y Cambio Climático (SEMABICC), dejó en claro que el uso de plásticos biodegradables o de material compostables no son la solución, esto al recordar la necesidad de tratar este tipo de material con tecnologías modernas para no causar daños al medio amiente.

“Este tipo de material requiere ser llevado a sitios con condiciones específicas de temperatura, humedad, entre otras aspectos, para ser desintegrados, eso es algo que no existe en la naturaleza y por ello incluso se debe generar composta industrial, lo cual no existe en la mayoría de los municipios del país y menos en Campeche”, comentó.

Tras lo mencionado resaltó que por ese motivo estos desperdicios terminan en el mismo lugar que los plásticos de un solo uso, es decir, en la naturaleza o en rellenos sanitarios, donde no se pueden desintegrar, porque no existen las condiciones para ello y por ese motivo generan el mismo problema de los plásticos normales, al fragmentarse en pequeños pedazos que luego son ingeridos por las especies.

Difícil cambio de cultura de un solo uso

La coordinadora de la campaña Océanos sin Plásticos también explicó que si bien son difíciles estos cambios de uso de materiales de un solo uso, lo importante siempre será apostar por hábitos de consumo más responsables con el planeta.

“Es verdad que se requiere mayor compromiso social, porque implica dejar atrás la conveniencia del usar y tirar, es decir, debemos evitar comprar en la calle alimentos con empaques desechables y comenzar a cargar envases reutilizables”, detalló.

Por ese motivo cuestionó qué tanto esfuerzo extra nos implica cargar nuestro termo para tomar agua o para tomar el café, lo cual, aseguró, sólo funcionará con leyes para que las grandes empresas ya no generen tantos productos con empaques de plásticos y con pequeñas acciones de cambios de hábitos a formas más sustentables se protege al ecosistema, siendo un ejemplo de lo mencionado la reutilización en lugar de preferir desechables de plástico o cualquier otro tipo.

(David Vázquez // Fotos: Lucio Blanco)