Detalles afectivos en el Día del Padre

HOPELCHEN, Cam., 21 de junio.- Uso de las redes sociales y la telefonía celular, regalos muy particulares y convivencia familiar fue lo común ayer domingo en ocasión de los festejos del Día del Padre. En esta ocasión muy pocos celebraron con bebidas alcohólicas por el desabasto del producto en la ciudad y ello hizo que la celebración algo discreto, austero y muy convencional.

Enlaces virtuales por videollamadas y videoconferencias, llamadas y mensajes significativos fueron los recibidos por los padres que fueron felicitados por sus hijos, ante la imposibilidad de hacerlo de manera presencial por la emergencia sanitaria por el COVID-19 que nos pide guardar la sana distancia, quedarnos en casa, el uso obligado de cubrebocas, así como el aseo frecuente de manos con agua y jabón, el uso de gel antibacterial y el desinfectar objetos de uso común que mucha gente lo hace con agua y cloro.

Lorenzo May, quien se desempeña como albañil dice que ha sido felicitado por familiares y amigos vía telefónica y salió al parque para platicar con sus amigos y comprar los insumos para una comida, misma que va a compartir con su esposa e hijos para no pasar por alto el Día del Padre.

Por la mañana, algunos padres de familia recibieron una agradable sorpresa, ya que una canasta les fue obsequiada al significar este día como un reconocimiento de sus hijos para agradecerles haberles dado la vida, los buenos consejos y encaminarlos a una formación profesional y con ello hombres de bien. La canasta contenía no solo dulces y golosinas, también traía tarjetas con mensajes muy emotivos donde con palabras se dice lo mucho que se quiere y reconoce al padre, el progenitor, el que cuida, orientar y protege a sus hijos.

Las canastas bellamente adornadas eran entregadas a domicilio cuidando las medidas de la sana distancia y con ello, el Día del Padre cambió de formato en la ciudad, las imágenes y las palabras suplieron a los abrazos y besos.

Pero no hay que olvidar que los padres, algunos por lo avanzado de su edad, forman parte de los grupos vulnerables que pueden ser afectados por la pandemia del COVID-19 que no respeta credo, ideológica partidista o condición económica para hacerse presente e incluso llevarlos a la muerte.

En la mayoría de los hogares fueron comidas en familia las que sirvieron para significar que este domingo 21 de junio fue el Día del Padre, los detalles estuvieron a la orden del día y la tecnología fue el invitado principal para hacerles ese día algo inolvidable, en el entendido de que habrá tiempo para las felicitaciones con abrazos y besos y una convivencia con alimentos y bebidas, sobre todo las de lúpulo y malta que es un artículo caro y escaso por estos días.

(Jorge Alberto Uc Moreno)