Aunque la prueba de laboratorio para determinar un caso positivo o negativo de COVID-19 es gratuita en los centros autorizados por la Secretaría de Salud, el tratamiento para recuperarse puede llegar hasta los 80 mil pesos si se hace uso de servicio médico particular, cifra que puede ahorrar un derechohabiente de una institución de salud, aunque después fallecer un paciente los familiares desembolsan hasta 16 mil pesos por servicio de cremación.
Una de las principales complicaciones del COVID-19, de acuerdo al reporte de las autoridades de salud es una la neumonía; una infección respiratoria aguda que afecta a los pulmones, y al no hacer uso de tratamientos previos y aunados a otros padecimientos es que puede costar la vida.
Es en esta fase cuando inician los gastos para un paciente, en caso de recurrir a un hospital particular los costos alcanzan los 23 mil pesos, por el uso de equipos, instalaciones y medicamentos, aunada la incapacidad de la persona que puede prolongarse hasta tres semanas.
Una neumonía severa, la cual requiera de estancia hospitalaria por algunos días, además de estudios y atención especializada, de ventilación mecánica, radiografía de tórax, colocación de catéter, examen de biometría hemática, medicamentos, puede elevarse hasta 80 mil pesos.
Para una familia de ingreso medio, puede realizarse algunos tratamientos en casa, y la primera complicación es comprar o rentar un tanque de oxígeno, que en las últimas semanas han incrementado su demanda y de precios, que va desde dos mil pesos hasta 17 mil 500.
Pese a ser derechohabiente de alguna institución médica, enfermarse de COVID-19 le significa gastos entre 5 mil a 10 mil pesos, iniciando por la compra de los antibióticos y el tanque de oxígeno, que se ofertan en diversas presentaciones y modalidades, desde un portátil de 2 litros de oxígeno, el cual se agota en un tiempo de uso indeterminado de 6 a 8 horas en 4 mil 221 pesos o 2 mil 987.
La segunda opción, un tanque de oxígeno médico portátil ligero asciende a 4 mil 435, con capacidad de 2 litros, pero dispone de todas las herramientas para su uso como conexiones y respirador. Posterior a este artefacto, se puede comprar un tanque y rellenarlo en un sitio especializado, cuesta 5 mil 799 pesos.
El mejor de los tanques de oxígeno es un portátil que incluye los accesorios, con un carrito portátil para trasladarlo a todas partes con un costo de 17,500 pesos, mientras que los Equipos de Protección Personal que incluyen Gafas, caretas de plástico, guantes, batas, gel desinfectante, gorros y cubrebocas, se localiza entre 2,420 a 4,768 pesos.
Lucran con la necesidad
Adicional a los altos costos, otro problema que enfrentan las familias son los fraudes a través de las redes sociales, según Alejandra Cabrera, una madre de familia que requirió la renta o copra de un tanque dijo que en su búsqueda encontró un post en el que ofertaban cilindros y al momento de terminar la transacción desapareció la página.
Dijo también que se encontró con personas que estaban lucrando con la necesidad, ya que vendían un tanque pequeño para emergencias en $2500 solo el cilindro, por lo que tenían que comprar o rentar de manera adicional el regulador, la cánula y llenar el tanque de oxígeno llegando a un total de casi 5 mil pesos,
Aseguró que por fortuna una persona tuvo a bien prestarle un cilindro grande sin realizar un cobro excesivo ya que tenía contemplado comprar uno con valor de entre los 8,500 a 9 mil pesos.
Por otra parte los trámites de servicio funeraria, para recuperar las cenizas de un cuerpo fallecido por COVID-19, cuesta entre 16 a 17 mil pesos, y de esa manera le liberan el acta de defunción.
Por Jorge Chan