Campeche

Al menos 109 guarderías particulares de Campeche están en quiebra tras cuatro meses de cierre, su funcionamiento dependía directamente de las cuotas de los padres de familia

En Campeche 109 establecimientos afiliados al Programa de Estancias Infantiles para Madres Trabajadoras, están prácticamente en quiebra tras cuatro meses de cierre, incluso algunas de ellas han sido transformadas para la venta de alimentos al no haber fecha determinada para el reinicio de sus operaciones.

Estas estancias atendían antes del inicio de la pandemia a tres mil 420 niños, de mil 280 padres de familia en los 11 municipios, cuya operación depende directamente de las cuotas de los padres de familia.

En la ciudad capital existen 53 Centros de Atención Infantil (guarderías), algunas de ellas sus propietarios han preferido cambiar de giro o simplemente se quedaron en el olvido y dejaron de pagar a sus empleados.

Las estancias que permanecen bajo resguardo y cuidado, son aquellas que pertenecen a instituciones como el Seguro Social, Instituto de Seguridad Social para los Trabajadores del Estado o aquellas con mayor capital económico.

Lo cierto, es que no saben hasta cuándo volverán ofrecer la atención a los menores porque ninguna autoridad les explica, mucho menos la Dirección de Protección Civil Municipal quién debe otorgar el visto bueno para su operatividad, expuso la propietaria de la ex estancia infantil “Nana Conch”, Wendy Escalante Reyes.

Reconoció que muchas mamás han reiniciado labores y preguntado por el servicio, pero la respuesta es la misma, desconoce cuándo reiniciar labores.

Las 53 guarderías en la ciudad, muchas de ellas fueron creadas a través del programa de la Secretaría de Desarrollo Social, a través del cual recibía financiamiento, pero con la nueva administración son las mamás quienes reciben el apoyo de manera directa y debían pagar el servicio, por lo que ahora no tienen ningún tipo de ingreso, lo que hace imposible costear el salario de los trabajadores, e incluso como propietarios han buscado desarrollar otra actividad.

Cada guardería atiende entre 20 a 60 niños y tener de 5 a 10 empleados, por lo que alrededor de mil 500 menores dejaron de asistir y unos 350 trabajadores se quedaron sin empleo.

Sólo el IMSS tiene ocho guarderías que brinda atención de primera infancia a más de 770 niños de entre seis y 43 meses de edad, sirviendo de apoyo a las madres derechohabientes para su desarrollo profesional. Antes del inicio de la pandemia, operaban en una capacidad instalada del 85 por ciento.

Externó que el desplome de los ingresos se vino abajo al 100 por ciento, porque ya no recibían niños, a partir de marzo, cuando se decretó la pandemia del SARS CoV2.

Con esta nueva modalidad solo había una madre becada por el Gobierno Federal que llevaba a su hija a estos lugares para el cuidado, por lo que estimó que en un 10 por ciento de los mil 500 menores que se podían estar atendiendo eran quienes recibían el dinero directamente de la administración Federal.

Dio a conocer que se inició el trámite con el Sistema Estatal para el Desarrollo Integral de la Familia (DIF) para que puedan ser reincorporados como Centros de Atención Integral Comunitaria (CAIC), sin embargo ante la pandemia del coronavirus se suspendió el trámite.

Escalante Reyes explicó que no tienen conocimiento de las medidas que deberían tomar en caso de que se registre la apertura de los establecimientos, ya que las guarderías del Instituto Mexicano del  Seguro Social (IMSS) reciben los boletines sobre la situación, de acuerdo al semáforo y las fechas en que podrían volver a operar, la capacidad y todos los requerimientos al respecto.

En un acercamiento con Educación Inicial de la Secretaría de Educación del Estado (SEDUC) quienes en ocasiones les canalizan alguna información referente a estas condiciones sanitarias, pero la instancias que regula la actividad de las guarderías es la Comisión para la Protección contra Riesgos Sanitarios (Copriscam) y Protección Civil Municipal, de quién tampoco recibe información o algún tipo de apoyo.

Lamentó que sean inexistentes para el Gobierno Federal ya que primero se convirtieron en un negocio privado para poder subsistir y luego ante la pandemia se desplomó los ingresos por lo que buscan acceder a los mecanismos de financiamiento que ofrece el Gobierno del Estado.

Puntualizó que tanto el crédito Covid que ofrece BanCampeche como el programa de recursos de la Secretaria de Desarrollo Social y Humano por 5,000 pesos son las opciones estatales a las cuales se acercaron para intentar acceder a dichos apoyos.

Señaló que en su caso buscan opciones de sobrevivencia, por lo que algunos se dedican ahora a la venta de alimentos, ya que los Centros de Atención Infantil dependían de los ingresos que percibían y no como las guarderías del IMSS que reciben su salario por la prestación de seguridad social que descuentan a los trabajadores afiliados.

 Por Wilbert Casanova Villamonte