Aunque este es el tercer domingo que trabajan Claudia Alejandra Chan Morales, su esposo y un empleados más, las ventas de cocos fríos en la Isla se mantienen muy bajas por la contingencia sanitaria, aunque sí hay clientela.
La mujer, que se ubica sobre la avenida Paseo del Mar, a la altura de la parte trasera del panteón Último Paseo, aseguró que es muy escasa la clientela por el tema de la pandemia de COVID-19.
“Pues un poco baja la venta, mayormente vendemos a los que pasan en los carros, porque para allá no dejan entrar”: dijo la vendedora refiriéndose a la avenida del Malecón Costero “Nelson Barrera Romellón” de Playa Norte.
Relató que son los sábados y domingos sus días de venta a partir de las 9 de la mañana hasta las 5 o 4 de la tarde, o hasta que se les acabe el último coco.
“Vendemos aproximadamente entre 40 y 80 cocos, los domingos son los días que más venta tenemos. Las ventas bajaron hasta un 50% en estos días por la pandemia”: narró.
Admitió que muchas personas acuden con mucha desconfianza por temor a contraer el padecimiento respiratorio, pero ellos mantiene la mayor higiene en el servicio que dan.
“Algunos vienen muy higiénicamente, casi no quieren comprar por el miedo al contagio y hay algunos que nos conocen como trabajamos y nos siguen comprando”: sostuvo.
Indicó que ya cuentan con una clientela que acude de forma habitual a visitarlos, principalmente la gente que va a hacer ejercicio o personas de la tercera edad que consumen el agua de forma medicinal como suero y subir las plaquetas.
Además, aseguró que recibieron apoyos por parte del Gobierno Federal en forma de crédito de 25 mil pesos, de los anunciados por el presidente Andrés Manuel López Obrador.
Con fotografía e información de Agustín Ferrer
Por Redacción Digital Por Esto!
JG