Carlos de los Santos, turista proveniente de Villahermosa, Tabasco, dijo sentirse emocionado de viajar aun con medidas sanitarias como traer cubrebocas al transitar la vía pública.
Mencionó que debido a la cercanía de su ciudad, decidió realizar un viaje de placer de un solo día para tomarse fotos por sitios turísticos y probar la comida típica de Carmen.
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José Fernández y su esposa Adriana Moreno, residentes de Cancún, aprovecharon que necesitaban realizar un trámite para pasar unos días en este sitio.
José afirmó sentirse con emociones encontradas porque después de varios meses de no salir de casa, es relajante y alegre poder pasear, pero a la vez, le genera miedo porque la contingencia aún no termina pese a que respeta los cuidados de prevención del COVID-19, nadie está exento de contagiarse.
“Tenemos que seguir haciendo consciencia de que las cosas no terminan todavía y hay que tener los cuidados para prevenir contraer la enfermedad. Da miedo tocar incluso una superficie y que ahí esté el virus, pero tenemos que aprender a vivir con esta Nueva Normalidad”, añadió la esposa.
Eduardo Acosta, originario de la Ciudad de Monterrey, dijo sentirse alegre por poder viajar después de meses de resguardo sanitario, dijo que esperaba un poco más de relajo y de algarabía por lo que le habían contado de la Isla, pero dio a entender que esto es bueno para combatir la contingencia sanitaria.
Alejandra Lara, visitante de la CDMX, llegó por invitación de una amiga y dijo sentirse despejada ya que los casos de coronavirus en la capital no permitían si quiera salir de casa.
“Es bonito tener la oportunidad de salir, aquí la gente no se aglomera tanto como en la CDMX, aquí se ve muy poca gente”, mencionó Alejandra.
Todos los paseantes coincidieron en que de haber un rebrote de contagios sería responsabilidad de los ciudadanos, por no acatar las recomendaciones sanitarias.
Por Juan García