Campeche

COVID-19 detiene proyectos ambientales en Ciudad del Carmen

Proyectos ambientales de la asociación Marea Azul se vieron detenidos ante la contingencia sanitaria por COVID-19.
Foto: Irene Barrada

Los proyectos ambientales se han visto en la necesidad de posponerse por seis meses debido a la contingencia sanitaria, falta de personal, suspensión de las instancias gubernamentales y los efectos del cambio climático, declaró Marco Antonio Rodríguez Badillo, fundador e integrante de Marea Azul A.C.       

“Proyectos que también asesoramos o damos seguimiento se vieron atrasados, el hecho de que las instituciones no trabajen y hayan perdido movilidad nos atrasa”, mencionó.

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Agregó que perdieron más de ocho meses en cuanto al calendario de trabajo; sin embargo, con las instancias con las que colaboran hay flexibilidad, pero no se descarta la afectación grave en tanto los que participan en las propuestas de conservación y en las sesiones.

Calentamiento global

Otra problemática es el cambio climático, ya que tuvieron afectaciones en el Estero Pargo, donde el oxígeno descendió a 0.6, cuando la vida requiere entre 4 y 5 partes de oxígeno disuelto; todo esto, dijo, afectó a la fauna acuífera, asimismo la salinidad disminuyó preocupantemente, de 30 a 35 partes que se tienen normalmente, llegaron a estar a cuatro partes de sal.

“Es una afectación muy seria, tanto en la cuestión de trabajo como en las condiciones ambientales que también han cambiado, agravado por un exceso de lluvia, sin olvidar que ha disminuido la temperatura”.

Continuaron con el proyecto de acuicultura con especies de la zona costera que implica una intervención en el proceso de cría para aumentar la producción, es decir, los peces son capturados naturalmente y criados en los estanques. Señaló que a través de este proyecto se le devuelve un poco a la Laguna de Términos por todo lo que ha dado, a pesar de que ha sido tratada con muy poco respeto.

Agregó que debido al cambio climático han tenido problema con las crías de pejelagarto y mojarras en el laboratorio de producción de crías porque ellos no soportan temperaturas debajo de 16 grados centígrados.

“No soportan temperaturas bajas, en la madrugada hemos tenido condiciones gélidas, por ello tenemos que usar calentadores, anafres para calentar el ambiente, porque si no se nos mueren las crías y la afectación es grave”, afirmó.

Destacó que continúa el proyecto de reciclaje en la Península de Atasta, programa de conservación llamado “Manejo acuícola sustentable en la cuenca Estero Pargo”, pero este año no fue favorable por el problema de la salinidad, oxigenación y el derrame de residuos sólidos en el acuífero.

Reprobó que siga el vertido de aguas negras y no tratadas al mar, no solamente en la Caleta, sino también en la Laguna de Términos y en el Estero Pargo, es por ello que el próximo año reforzarán el manejo de los residuos sólidos o líquidos urbanos.

JG