A un año de que se registró el primer caso de COVID-19 en Campeche la crisis no es sólo sanitaria, también social y económica por el impacto en la generación de empleos y en los indicadores de la actividad comercial e industrial de la entidad.
Hace exactamente 12 meses, cuando la Secretaría de Salud (SSa) notificó al paciente uno con el virus SARS-CoV-2 en el territorio, el estado contaba con un total de 133 mil 756 plazas laborales afiliadas ante el IMSS, de entonces a la fecha se han perdido seis mil 557 empleos asegurados según reporta la Secretaría de Trabajo y Previsión Social (STPS).
Actualmente, hasta febrero del 2021, los empleos cayeron a 127 mil 199 puestos afiliados al instituto.
En primera instancia, Campeche, al igual que el resto de las entidades de México, presentó una pérdida de empleos a consecuencia del golpe económico que las restricciones implementadas por las autoridades de los tres niveles de gobierno como medida de prevención de contagios de COVID-19.
Los meses con mayor pérdida de empleos fueron julio de 2020, cuando se llegó a los 124 mil 251 puestos de trabajo, es decir que hasta ese entonces se habían perdido nueve mil 505 empleos en comparación con marzo de ese mismo año, y en agosto pasado se llegó a los 123 mil 878, por lo que hubo nueve mil 878 trabajos perdidos también comparados con el inicio de la pandemia.
Además, el Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi) registra que hasta septiembre de 2020 la actividad económica estatal mostró una contracción de menos 10.3 por ciento.
Asimismo, de acuerdo con la Encuesta Nacional de Ocupación y Empleo (ENOE), correspondiente al último trimestre del 2020, la entidad registraba una población ocupada de 421 mil 925 personas y 14 mil 786 desocupadas o sin empleo, esto al referirse a la Población Económicamente Activa (PEA) que son los mayores de 15 años que ya han recibido algún ingreso en su vida por realizar alguna actividad productiva.
No obstante, de acuerdo con cifras de la misma ENOE, y del colectivo de investigación económica “México ¿Cómo Vamos?”, el 53.8 por ciento de dicha población ocupada se encontraba en el plano de la informalidad laboral.
En cuanto al crecimiento económico estatal, que “México ¿Cómo Vamos?” define como el incremento en la producción de bienes o servicios de una economía, hasta septiembre de 2020, fecha del último registro del Indicador Trimestral de la Actividad Económica Estatal (ITAEE) del Inegi, Campeche tuvo un retroceso de menos 10.3 por ciento en su crecimiento económico por sus actividades primarias, comerciales e industria.
Lo anterior posicionó a la entidad en el lugar nueve con mayor contracción económica a nivel nacional, por debajo de Coahuila que retrocedió menos 10.4 y por encima de Puebla que decreció menos 9.9; la peor caída la tuvo Quinta Roo con menos 29 puntos.
Otro dato simplificado por "México ¿Cómo vamos?" Es la pobreza laboral en el estado, que hace referencia a la cantidad de hogares en los que el ingreso económico laboral es menor a la cantidad necesaria para alimentar a sus miembros.
Hacia el último mes de 2020, en un 42.5 por ciento de los hogares Campechanos o 110 mil 808 viviendas según el Censo de Población y Vivienda 2020 del Inegi, los ingresos salariales de la familia no rinde para adquirir cubrir la alimentación de sus integrantes. Para marzo de 2020, la pobreza laboral en Campeche se daba en un 40.8 ciento de sus hogares o 106 mil 375 viviendas, es decir que durante este periodo cuatro mil 433 casas más pasaron a este plano.
SY