Aunque los pronósticos anuncian que no se superarán las temperaturas máximas de la entidad, el director de Administración de Emergencias y Bomberos de la Secretaría de Protección Civil (Seproci), Mario Alberto Elizalde Jiménez, dio a conocer que en lo que va del año se han registrado 160 incendios conurbados, es decir, dentro de la ciudad o en comunidades de la demarcación municipal, y emitió algunas recomendaciones para evitarlos.
El clima empezará a elevarse en las próximas semanas, con ello la posibilidad de que se generen incendios en terrenos baldíos, viviendas o zonas verdes dentro del municipio también crece, por eso Elizalde Jiménez consideró importante que la población conozca los principales riesgos que se corren.
Recomendó implementar medidas preventivas, ya que según los registros de la dependencia, el 80 por ciento de los siniestros son provocados y un menor porcentaje corresponde a quemas que se salen de control.
Externo que “lo primero que se debe considerar es verificar si tenemos cerca de nuestra vivienda algún terreno baldío, de ser positivo es importante tratar de ubicar al responsable o dueño, para que éste lo vaya a limpiar o si nos perjudica, limpiarlo con machete, cortar el pasto, porque si lo quemamos podemos tener problemas de salud y ponemos en riesgo la propiedad y a los demás”.
“Inhalar los componentes del humo podría resultar en problemas de salud graves, ya que las partículas finas podrían ingresar a los pulmones y provocar una serie de problemas que van desde irritación en los ojos y el goteo nasal, hasta enfermedades cardíacas y pulmonares crónicas”, puntualizó.
De acuerdo con el especialista, en la ciudad la mayor parte de los siniestros se propician por la quema desmedida de maleza, o cuando habitantes tiran colillas de cigarros en el pasto seco y por el “efecto lupa” que provocan las botellas de vidrio en calles o terrenos baldíos y que detonan las deflagraciones.
“Saldo blanco”
En este sentido, señaló que hasta ahora se han atendido 160 siniestros de este tipo, de los cuales no se presentaron heridos ni pérdidas humanas. “Las llamas se salen de control y pueden llegar a las viviendas aledañas, hasta ahora se registra un aproximado de 160 incendios y se dan porque prenden los terrenos para evitar la generación de animales peligrosos o que delincuentes se escondan”, finalizó.
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