Líder petrolero alerta sobre explosión en ductos de Pemex en la Sonda de Campeche

Los pozos Bacab, Abkatun, Ku, Maloob, Akal y Nohoch, campos petroleros del complejo Cantarell, llevaron la producción de crudo a un millón de barriles diarios en la década de 1980, y desde ese año a la fecha los ductos y líneas subacuáticas de hidrocarburo no ha recibido un mantenimiento integral, porque las compañías que tenían contratos para ello, en contubernio con Petróleos Mexicanos (Pemex) sólo simularon, por ello, los accidentes en la Sonda de Campeche son constantes, y la mayoría se ha quedado en la incógnita, mencionó el presidente del Grupo Unido Campechano de Trabajadores Petroleros Locales (GUCTPL), Javier del Carmen Bello Ávila.

En 1980 Pemex obtenía un millón en producción de barriles en el complejo Cantarell, lo que significa que los ductos y líneas fueron instaladas en 1979, a raíz de la explosión del pozo Xtoc 1, de allí que las líneas tienen 40 años y lo peor de todo el mantenimiento ha sido de simulación en todas las estructuras.

Dijo que la presión que existe en la conducción de los hidrocarburos en todos los ductos en el complejo Cantarell tiene como mínimo de mil 500 a tres mil libras de presión, lo que significa que cada tubería y válvula se desgasta y si no hay mantenimiento se generan las fugas.

Apuntó que el director general de Petróleos Mexicanos, Octavio Romero Oropeza, debe tener conocimiento de lo que sucede en el interior y exterior de la empresa, el hecho que digan que la petrolera tiene ganancia y que ahora producirá una cantidad equis, eso no impide que se dé prioridad en mantenimiento a todas las instalaciones.

“En días pasados el Presidente de México Andrés Manuel López Obrador dio a conocer que el Puerto de Pajaritos, Veracruz, se cae a pedazos; hay que imaginarnos las instalaciones de Cantarell, que tienen 40 años bajo presión, corrientes marinas, entre otros, por lo que podría haber una explosión en serie”, mencionó.

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Indicó que cuando la empresa Oceanografía tenía el contrato de mantenimiento a las líneas, según, tenía un departamento de vigilancia y mantenimiento; sin embargo, sólo simulaban traer a buzos de Francia y la compañía cobraba una exuberante factura en dólares por mantenimiento y supervisión.

JG