A escasos 11 días de que inicie la temporada de captura de pulpo 2021, habitantes de la Ínsula aún esperan la vigilancia solicitada a las autoridades estatales y federales, pues la depredación sigue imparable y existe el riesgo de que el 1 de agosto no salgan embarcaciones pues los ribereños prevén escasas capturas, señaló Oscar Narváez, pescador de la comunidad.
Explicó que hace una década capturaban con jimbas y cordeles hasta 100 kilos de pulpo, pero actualmente sólo consiguen como máximo 30 kilos, en raros casos, pues el promedio es de 10 kilogramos por pescador.
Abundó que con base a un precio de 100 pesos por kilo del molusco, hay una pérdida de siete mil pesos por día al comparar las capturas del 2020 con hace una década.
Sin embargo, asentó que quien quiera capturar otra vez 100 kilos debe practicar el llamado “rancho”, que consiste en permanecer más de dos días en altamar, pero en un mismo punto.
Luego de explicar estás pérdidas, recordó que como pueblo de pescadores se han unido para vigilar la costa de los saqueadores que se llevan especímenes de talla infantil, ya que incluso formaron un Comité con este propósito; sin embargo, los furtivos los superan y no les queda más que pedir ayuda a las autoridades de los tres niveles de gobierno.
Oscar evidenció que en la Isla prevalece la ambición de empresarios pesqueros yucatecos que patrocinan a los buzos y pescadores ilegales que no les importa dañar al ecosistema marino, además también hay lugareños que se unieron a estas malas prácticas, lo que provoca que cada vez escasee más el pulpo.
Por lo anterior, el ribereño reclamó que no hay ningún tipo de vigilancia que prevenga el saqueo de especies marinas, además, esta problemática ha sido aprovechada para arrojar al mar bovedillas, llantas, ramas de árboles y botes de plástico que con el tiempo se convierten en arrecifes artificiales para alojar al octópodo, pero afectan el medio y la pesca tradicional de que la dependen familias de la comunidad que aún practican la captura del pulpo con artes de pesca legales.
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Espetó que esto prueba la falta de atención y negligencia de las autoridades, diputados y senadores, ya que hasta la fecha no se ha dado atención a la vigilancia.
GH