El pasado miércoles, José Ramón, oriundo de Tabasco, aseguró que, por negligencia médica al aplicarle dosis excesiva, su familiar de 10 meses perdió la vida. Sin embargo, el Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS), a través de las oficinas de representación, dieron a conocer que la verdadera causa del fallecimiento fue por choque cardiogénico, porque desde el ingreso recibió atención médica.
El afectado señaló que el menor ingresó a la operación la mañana del cuatro de enero en punto de las 8:00 horas; el procedimiento que le harían era el de reconstrucción del labio leporino y paladar hendido, así que la vida del infante no corría peligro, pero cerca del mediodía le notificaron a la madre que tras la intervención quirúrgica el pequeño registró dos infartos por “el exceso” de anestesia.
Durante el jueves, el IMSS fijó su postura y señaló que el bebé falleció por choque cardiogénico, que es una afección mortal en la que el corazón repentinamente no puede bombear sangre suficiente para satisfacer las necesidades del organismo; en general, la afección es provocada por un ataque cardíaco grave, pero no todas las personas que sufren un ataque cardíaco tienen un choque cardiogénico.
Según el IMSS, esta reacción fue derivada de las múltiples malformaciones congénitas y dimorfismo que padecía el pequeño. También, aseguró que, “desde su ingreso procedente de Tenosique, Tabasco, al Hospital General de Zona (HGZ) Número Uno ‘Dr. Abraham Azar Farah’ en Campeche, recibió la atención médica multidisciplinaria necesaria y con ese mismo equipo de médicos especialistas fue programada la cirugía”.
Detalló que antes del acto quirúrgico, en la inducción anestésica (durante la aplicación del sedante), el menor presentó paro respiratorio, el cual fue revertido en cinco ocasiones sin que hubiera recuperación completa y “a pesar de los esfuerzos de los especialistas, lamentablemente el bebé perdió la vida”.
Sin embargo, el hombre (oriundo de Tenosique, Tabasco) dijo que procedería legalmente contra la institución, así como contra médicos y enfermeras que participaron en la operación, ya que el menor, “gozaba de buena salud antes de ingresar al hospital”.
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CC